Belgrado, 8 sep (EFE).- Varios miles de ciudadanos, encabezados por universitarios, han protestado este lunes en Belgrado contra la brutalidad con la que, denuncian, la Policía dispersó una manifestación antigubernamental el pasado 5 de septiembre.
Aquel día, miles de personas marcharon en la ciudad de Novi Sad contra el violento desalojo de los universitarios que ocupaban desde hacia meses las Facultades de Filosofía y de Deportes, para denunciar lo que consideran es una creciente corrupción y autoritarismo del Gobierno nacionalista.
Los agentes usaron granadas aturdidoras y gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes.
Previamente, el Ministerio del Interior había informado de que tenía información, sin dar detalles, de que los participantes en la concentración no autorizada planeaban atacar a la Policía.
Los universitarios marcharon hoy por la calle en Belgrado bajo la consigna «la libreta universitaria es más fuerte que la porra», informa la emisora N1.
La ola de protestas comenzó en noviembre del año pasado en Novi Sad tras el derrumbe de una marquesina de una estación de tren que acababa de ser renovada por empresas chinas.
La exigencia inicial de responsabilidades y de información sobre la adjudicación y ejecución de la obra pronto se transformó en una denuncia contra el Gobierno del presidente Aleksandar Vučić, que domina la política serbia desde 2012.
La Policía ha abandonado ya la Facultad de Filosofía de Novi Sad pero sigue presente en la de Deportes.
La comisaria de la Unión Europea (UE) para la Ampliación, Marta Kos, pidió hoy desde Viena a la policía serbia que «actúe de manera adecuada y respete los derechos fundamentales», informa la agencia Beta.
Las protestas, mayoritariamente pacíficas, derivaron a mediados de agosto en varias jornadas de desordenes y choques entre la Policía y los manifestantes, con acusaciones mutuas de violencia y decenas de heridos y detenidos, pero la situación se había tranquilizado desde entonces.
El presidente Vučić se ha referido reiteradamente a los estudiantes como terroristas y cobardes y ha afirmado que las protestas son un intento de derrocarle y se niega a satisfacer la demanda de los manifestantes de celebrar elecciones anticipadas.