Madrid, 26 abr (EFE).- La ministra de Sanidad, Mónica García, ha trasladado este sábado su solidaridad con el pueblo palestino, que supera los 50.000 asesinados, entre ellos más de 15.000 niños y niñas, desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamas, y ha advertido de que “con el genocidio no se comercia, no se pacta y no se negocia”.

La ministra de Sanidad y líder de Más Madrid, partido integrado en el grupo parlamentario Sumar, ha participado este sábado en el Plenario Autonómico Extraordinario de Más Madrid, junto a las portavoces autonómica, Manuela Bergerot, y municipal, Rita Maestre.
“Nosotras lo decimos alto y claro, las veces que haga falta: Con el genocidio no se comercia, no se pacta y no se negocia”, ha advertido García después de una semana marcada por el polémico contrato con una empresa de Israel para la compra de balas, que abrió una crisis en el Gobierno de coalición.
García se ha mostrado muy orgullosa de haber coordinado la evacuación de niños y niñas palestinos para tratarse en España de distintas patologías y heridas, y que puedan recuperaran su dignidad, su humanidad y su vida.
Ha recordado la tragedia de la dana, de la que se cumplen ahora seis meses, y se ha sumado al grito de “Mazón, dimisión”. “No se puede ser más indigno y no se puede ser más sinvergüenza”, ha denunciado en referencia a la gestión de esta catástrofe por parte del presidente de la Generalitat Valenciana.
Ha defendido que la política es “un oficio noble”, pero ha denunciado que también hay “un oficio absolutamente indigno que es el que constantemente nos recuerda el PP” en la figura de Mazón.
García ha tenido palabras de condolencias por la muerte del papa Francisco, de quien ha dicho que ha sido “vilipendiado e insultado” por personas como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, o el líder de Vox, Santiago Abascal, por hablar de cuestiones como la justicia social, los pobres, las personas vulnerables o las minorías.
“Se ha convertido en un enemigo de la derecha y de la ultraderecha reaccionaria de todo el mundo solamente por poner encima de la mesa la justicia social”, ha lamentado para después añadir: “si estos son los enemigos de la derecha y la ultraderecha reaccionaria, aquí tienen a muchísimos más enemigos”.