Madrid, 3 abr (EFE).- La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha llamado este jueves al PP a cambiar de actitud para poder acordar entre los dos grandes partidos un nuevo sistema de financiación autonómica que, ha advertido, no puede ser un “traje a medida” para ninguna comunidad.
En una comparecencia en la Comisión de Hacienda del Senado, la titular de Hacienda ha argumentado que las posiciones de máximos de cada comunidad son lógicas, pero a la vez impiden avanzar en el consenso, y que “por eso sería mucho más sencillo poner de acuerdo a los dos grandes partidos con representación en todo el territorio”.
“Somos nosotros los que tenemos que tener la capacidad de poner de acuerdo discrepancias legítimas de los presidentes autonómicos”, ha planteado la vicepresidenta, que ha invitado al PP a una mesa de partidos que permita avanzar en ese objetivo.
Montero ha comparecido a petición propia para informar sobre los acuerdos alcanzados en el Consejo de Política Fiscal y Financiera el 26 de febrero y a petición del PP para informar sobre el acuerdo alcanzado con ERC “que otorga a Cataluña un régimen de financiación singular y aclarar si supone una concesión de soberanía fiscal” y de Vox para informar sobre financiación autonómica “y el modo en que piensa sufragar la condonación de la deuda de Cataluña”.
Respecto a la propuesta para condonar o que el Estado asuma 83.252 millones de euros de deuda autonómica, la ha calificado como una medida “sin precedentes, valiente y generosa” y ha subrayado que beneficiará a todos los territorios porque está planteada con criterios “técnicos, objetivos, transparentes e iguales para todas las comunidades”.
María Jesús Montero ha hecho otro llamamiento, en este caso a la responsabilidad de los gobiernos autonómicos del PP, después de recordar que estos decidieron ausentarse de la reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera en el que se aprobó la propuesta.
A su juicio, es incomprensible la oposición del PP a esta medida cuando sus comunidades se benefician de 60.000 de los 83.000 millones de euros de deuda que se condonaría, aunque tampoco tiene ningún sentido, ha dicho, que la formación que preside Alberto Núñez Feijóo y sus ejecutivos autonómicos rechazaran la senda de déficit y las entregas a cuenta que luego exigen actualizar.
Montero ha pedido también al PP que no alimente “discursos de enfrentamiento entre territorios” y ha defendido que sería bueno que las formaciones políticas se alegrasen “de que Cataluña siga siendo un motor importante de la economía” española.
En su intervención, la vicepresidenta ha asegurado que en la propuesta de condonación de deuda no hay nada de cesión bilateral a Cataluña ni de chantaje por parte de las formaciones; que no impacta en la consolidación de la deuda de España en su conjunto; y que ni sustituye ni paraliza el debate sobre la reforma del sistema de financiación autonómica.
En sucesivas respuestas a los grupos parlamentarios, Montero ha replicado al PP que no tiene sentido común ni racionalidad que se opongan a la condonación de la deuda y ha pronosticado que no van a poner una propuesta de financiación encima de la mesa “porque no hay fortaleza en la dirección del Partido Popular frente a sus presidentes autonómicos”.
A Junts le ha expresado su alegría por que haya manifestado que va a apoyar la propuesta de condonación de la deuda y a ERC le ha contestado por un lado que la financiación autonómica “no es una materia fácil de diseñar” y “va a requerir su tiempo”, lo que no significa que el Gobierno lo esté ralentizando, y por otro que para ella “lo importante no es quién recauda sino cuánto se recauda y cómo se distribuye”.