O Grove (Pontevedra), 3 oct (EFE).- El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha anunciado un plan de choque y un cambio en el protocolo de cribado de cáncer de mama para «perfeccionarlo» después del fallo de información que ha obligado al Servicio Andaluz de Salud (SAS) a contactar con 2.000 mujeres que cuentan con pruebas dudosas.
En declaraciones a los periodistas tras intervenir este viernes en la séptima edición del Foro La Toja- Vínculo Atlántico en O Grove (Pontevedra), el presidente andaluz ha explicado que están trabajando en un plan de choque que previsiblemente se anunciará la semana que viene y que este fin de semana seguirán perfilando para, primero detectar dónde ha estado el problema, y darle solución.
El presidente andaluz ha explicado que con el protocolo vigente cuando un radiólogo o un especialista tenía dudas sobre la existencia de un cáncer «lo dejaba en modo suspensión y no se le comunicaba a la mujer para no generarle incertidumbre, porque el 98 % de las pruebas que se hacen afortunadamente no dan positivo». Y para evitar la ansiedad que se generaba, ha recordado, no se le decía al paciente y se hacían pruebas posteriores.
Ahora, «lo cambiaremos y daremos toda la información para que el paciente tenga toda la información, sabiendo que la probabilidad de que tenga cáncer es mínima, pero que al menos sí tenga conocimiento», ha indicado Moreno.
Tras ese fallo en el programa para la detección precoz de la enfermedad, el SAS informará en el plazo de una semana a las mujeres a quienes se les detectó una «lesión probablemente benigna» -a diferencia de los diagnósticos negativos o positivos sí notificados- y volverán a ser llamadas para una nueva prueba.
Todo ello teniendo en cuenta que, según ha admitido la Junta, en los casos en los que se detectaron ese tipo de «lesiones posiblemente benignas» las mujeres «pueden no haber sido informadas» de que su caso seguía un procedimiento clínico con supervisión médica.
El presidente andaluz ha confiado en que este fallo no haya sucedido en otras pruebas diagnósticas aunque ha indicado que están «auditándolo todo» para saber exactamente «si ha habido algún problema en algún lado y dónde» ha ocurrido.
Preguntado por las responsabilidades políticas, Moreno ha asegurado que ahora lo que le preocupa y obsesiona y lo que le quita el sueño «es chequear a esas 2000 personas», con resultados dudosos aunque ha dicho que los especialistas le han asegurado que la inmensa mayoría no van a tener problemas.
«Y una vez que identifiquemos el problema y corrijamos, veremos a ver quién está detrás de esa responsabilidad, si hay un director general, hay un jefe de servicio, hay una consejera, un viceconsejero…. Y a partir de ahí, pues lógicamente tomaremos decisiones», ha agregado.
Pero hay que mejorar «muchas cosas» en opinión del presidente andaluz ya que, ha indicado, él no se enteró del tema hasta el pasado lunes por la noche: «Pero esta situación triste y desgraciada que estamos viviendo nos sirve para mejorar el sistema».
Y ha recordado que a cualquiera de estas mujeres «que tenga la expectativa de poder estar enferma de cáncer, hay que tratarla con el máximo cariño y el máximo respeto».