Muestra expone en Alejandría el patrimonio de su ciudad antigua hallado bajo el mar

Inauguración de la nueva exposición temporal del Museo Nacional de Alejandría con estatuas hundidas durante siglos en el Mediterráneo. La muestra se inauguró en la noche del miércoles, en coincidencia con la celebración del Día del Patrimonio Cultural Subacuático.EFE/Pablo de Aguinaco

Alejandría (Egipto), 21 ago (EFE).- Estatuas procedentes de la antigua ciudad de Alejandría, hundidas bajo el mar durante siglos por terremotos y maremotos, se exhiben al público desde este jueves en el Museo Nacional de esa urbe mediterránea, que durante seis meses perimirá acercarse a un patrimonio que hasta hace poco permanecía inaccesible bajo las aguas del mar.

La muestra se inauguró en la noche del miércoles, en coincidencia con la celebración del Día del Patrimonio Cultural Subacuático, y fue presidida por el ministro de Turismo y Antigüedades egipcio, Sherif Fathy, acompañado del gobernador de Alejandría, Ahmed Khaled Hassan, y de los embajadores de Italia, Grecia y China.

La exhibición, que se abrió con un marcado perfil institucional y mediático, pretende impulsar la ambición del Gobierno egipcio de proyectar a Alejandría como un destino cultural y turístico de primer nivel, al mismo que El Cairo, Luxor o Asuán (Sur), y de subrayar su relevancia histórica y comercial a escala global.

En ese sentido, durante la presentación Fathy destacó que «los tesoros de esta ciudad son infinitos», ya que «dondequiera que excavamos, encontramos una reliquia».

Las piezas en la exposición «que todos deseamos ver cuanto antes», según dijo el secretario general del Consejo Supremo de Antigüedades, Mohamed Ismail Khaled, proceden de los restos de la ciudad antigua sumergida y que los trabajos de recuperación se han llevado a cabo desde 2023.

Joya del mundo antiguo

Inauguración de la nueva exposición temporal del Museo Nacional de Alejandría con estatuas hundidas durante siglos en el Mediterráneo. En la imagen, el ministro de Turismo y Antigüedades egipcio, Sherif Fathy (i), durante su intervención. EFE/Pablo de Aguinaco

Alejandría, fundada en el 331 a.C. por Alejandro Magno, se convirtió en capital del Egipto helenístico y albergó la célebre Biblioteca y el Faro, una de las siete maravillas del mundo antiguo. Este peso histórico hace que, para Khaled, Alejandría siga siendo a día de hoy «una de las ciudades más importantes del planeta».

La ciudad mantuvo durante siglos un gran peso económico y cultural, hasta que terremotos y maremotos entre los siglos IV y VIII d.C. provocaron el hundimiento de buena parte de su litoral, incluida la isla de Antírrodos -donde se encontraba el palacio vinculado a Cleopatra-, dejando sumergidos templos, colosos y muelles que hoy conforman uno de los yacimientos arqueológicos subacuáticos más relevantes del mundo.

Desde los años 90, campañas arqueológicas coordinadas con el Instituto Europeo de Arqueología Submarina, dirigido por el francés Franck Goddio, han permitido localizar estatuas, bloques arquitectónicos, monedas, joyas y objetos rituales en el puerto oriental y la bahía de Abukir.

Las piezas que ahora se exhiben en el Museo Nacional y el Museo Grecorromano de la ciudad son fruto de estos esfuerzos y representan un testimonio directo de la vida urbana, religiosa y comercial de Alejandría durante su periodo de esplendor como puerto en el Mediterráneo.

El Museo Nacional de Alejandría, instalado en un palacete de estilo italiano y abierto en 2003, alberga más de 1.800 piezas que abarcan desde la época faraónica hasta la islámica.

Proyección turística

Esta muestra temporal pretende ser un emblema del renacimiento cultural de la ciudad y de la recuperación de su patrimonio arqueológico, igual que la nueva Biblioteca Alejandrina fundada en 1996, que refuerza, según Fathy la proyección de la ciudad egipcia como «polo turístico y educativo de alcance internacional».

El acto contó con un carácter exclusivamente institucional, sin la presencia de arqueólogos extranjeros ni público general, y los especialistas del Consejo Supremo de Antigüedades ofrecieron explicaciones técnicas sobre las piezas y el proceso de recuperación, que ha requerido años de planificación y cuidado extremo para evitar daños en los restos sumergidos.

Esta inauguración se complementará con futuras actividades en la Biblioteca Alejandrina y con nuevas campañas en Abukir, donde se han identificado templos, estatuas colosales y restos urbanos que podrían integrarse en próximas exposiciones.

Con ello, Egipto busca «reforzar la imagen de Alejandría como capital cultural del Mediterráneo y consolidar el turismo arqueológico como un pilar económico y educativo de la ciudad, al tiempo que reivindica su importancia histórica y su papel como puerto comercial», afirmó su gobernador.

Pablo de Aguinaco