Asunción, 21 jun (EFE).- Muñecos caracterizados como políticos son los candidatos preferidos en Paraguay para convertirse en los ‘Judas kái’ (el Judas que se quema, en guaraní) que serán arrojados a una hoguera durante la festividad de San Juan, una de las más concurridas y tradicionales del país.

El Mercado 4, el más grande de Asunción, vivió este sábado una feria previa a la fiesta de San Juan Ara o Día de San Juan, en la que los artesanos aprovecharon para vender figuras elaboradas con trapos y otros materiales.
Los muñecos representan a personajes que no cuentan con el aprecio popular y serán quemados en un ritual la noche del 24 de junio.
Carmen Amarilla, una artesana del mercado, comentó a EFE que los paraguayos se inspiraron en el Judas Iscariote, «el que le traicionó» a Jesús, para crear los ‘Judas kái’.
«Prácticamente son los políticos, o (personas) del barrio o que dirigen, que no obró bien, que no obró por su pueblo, por su gente», dijo esta mujer de 59 años, quien explicó que hacer un ‘Judas kái’ es una forma de desquitarse con las personas a las que representan.
Este año «la gente pide» muñecos con el rostro del presidente de Paraguay, Santiago Peña, o del intendente (alcalde) de Asunción, Óscar Rodríguez, destacó Amarilla, quien desde hace diez años se dedica a confeccionar estas figuras.
«Es una tradición de años y años, de nuestros antepasados, de nuestros abuelos, tatarabuelos, que no se pierde esa mística», resaltó.
Confeccionar un muñeco a base de tela, algodón y en ocasiones con cohetes que llevan pólvora en su interior, demora unas tres horas, señaló a EFE Luis Alberto Flores, de 56 años, que lleva una década armando las figuras en el mercado.
Este año, Flores ha fabricado unos 20 muñecos, cada uno lo vende a 100.000 guaraníes (12,5 dólares).
La fiesta de San Juan, que puede extenderse durante un mes, es un motivo para compartir comidas típicas paraguayas como el ‘pastel mandi’o’ (empanada de yuca) o la ‘payaguá mascada’, una torta frita hecha con carne y yuca y otros manjares que este sábado se ofrecieron en el mercado capitalino.
Durante la festividad hay lugar para juegos populares como la ‘pelota tata’ (pelota de fuego, en guaraní) o el toro candil, una estructura hecha de cañas al que se le encienden las astas para simular una corrida.
En estas fechas los paraguayos también realizan el ‘tata pyĩ ári jehasa’, que en guaraní significa caminar sobre las brasas, actividad en la que, según la creencia popular, solo se quema «el que tiene pecado».
La fiesta de San Juan coincide con la festividad cristiana de la Natividad de San Juan Bautista y los días en torno al solsticio de verano en el hemisferio norte y de invierno, en el Cono Sur.