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Nace el Centro David Bowie, un homenaje inmersivo a su vida y obra en Londres

Fotografía de archivo (12-7-96) del cantante británico David Bowie. EFE

Londres, 10 sep (EFE).- La vida y obra del cantante británico David Bowie contará con un espacio de homenaje e investigación permanente en el nuevo edificio del museo Victoria & Alberto (V&A) de Londres, en el que se reúnen más de 90.000 objetos del archivo del artista, como documentos, instrumentos, vestidos y otras piezas nunca antes vistas.

La muestra permanente, en el edificio East Storehouse del V&A, en el Parque Olímpico (este de Londres), permitirá a los visitantes admirar de cerca cualquier pieza de su elección mediante un pionero servicio de reserva previa, que les llevará a conocer, entre otros, una inédita guitarra de 12 cuerdas o el proyecto inacabado de Bowie.

«Tenemos una selección de 200 objetos expuestos que cuentan la historia de la vida y la carrera de Bowie y trazan su trayectoria como artista interdisciplinar», relató a EFE Madeline Haddon, comisaria del V&A East Storehourse, que cuenta en su conjunto con más de 250.000 objetos y mil archivos distintos.

El Centro David Bowie consta de nueve mini exposiciones que presentan aproximadamente 200 piezas destacadas y exploran diferentes temas y elementos del archivo, desde el proceso creativo y las personalidades de Bowie hasta sus numerosos colaboradores e influencias, como Little Richard.

  Guitarras, trajes y guiones

En el océano de piezas que inunda las dos salas que conforman este taller creativo destacan algunas que no han sido nunca antes expuestas, como una guitarra de 12 cuerdas de Ziggy Stardust, el alter ego extravagante, andrógino y colorido que Bowie creó en 1972 para su disco ‘The Rise and Fall of Ziggy Stardust and the Spiders from Mars’ y que le catapultó a la fama mundial.

Este instrumento, que los trabajadores del V&A manipulan con sumo cuidado, es uno de los que los visitantes pueden solicitar ver muy de cerca, junto a la levita diseñada por Alexander McQueen y el propio Bowie para su concierto de 50 cumpleaños en 1997, y que ha sido el más solicitado en la primera tirada de entradas que se puso a la venta.

Aunque lo más revelador sobre la incansable producción del ícono del rock es la cantidad de proyectos inacabados que se exhiben.

Tanto es así que uno de los temas en torno a los que gira el espacio creativo son esos garabatos, apuntes y bocetos de instalaciones, canciones e ideas que rondaban la cabeza de Bowie hasta su fallecimiento en 2016 a los 69 años y que no llegaron a ver la luz.

«Uno de estos temas se centra en proyectos no realizados. Películas, producciones teatrales, álbumes en los que estaba trabajando y que nunca completó por diversas razones. Esto demuestra que creaba y pensaba ideas sin cesar, abarcando todos los géneros y difuminando las fronteras entre la música y la interpretación», explicó Haddon.

Otra de esas ideas que no vieron la luz es un álbum que no llegó a realizar titulado ‘Leon in India’ que iba a constar de una película y un CD interactivo y del que quedan unos bocetos que el visitante puede admirar muy de cerca.

  El musical póstumo

Pero la guinda del pastel es sin duda un musical elaborado poco antes de su muerte y ambientado en el siglo XVIII que se considera la gran obra póstuma inacabada de David Bowie, que solo conocían el artista y su asistente y que fue descubierto recientemente en su estudio en Nueva York.

Titulado ‘The Spectator’, Bowie anotó decenas de ideas en torno a esta obra, e investigó sobre artistas, escritores, criminales y comunidades queer para ilustrar a la sociedad londinense de la época, incluyendo personajes históricos e inventados.

El enclave era la céntrica zona londinense de Covent Garden, y el musical, del que se detallan escenas en notas y un pequeño cuaderno, comenzaba con la dramática ejecución del conocido criminal Jack el 16 de noviembre de 1724.

«Esperamos que la gente venga aquí no solo para aprender sobre David Bowie, sino también para inspirarse en su propia creatividad», manifestó Haddon.

Aunque también hay espacio para el reconocible estilismo del artista, con varios de sus trajes más emblemáticos, desde los que el diseñador británico Freddie Burretti creó para Ziggy Stardust hasta los conjuntos del disco ‘Heathen’ de la francesa Agnes b, pasando por el traje de boda de Thierry Mugler que Bowie lució en 1992.

En el espacio central, hay una zona reservada con una gran mesa para explorar el archivo en profundidad previa reserva con cajas temáticas en las que se guardan reproducciones de notas y documentos especialmente seleccionadas por los comisarios.

Miguel Salvatierra