Quito, 18 mar (EFE).- El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, consideró este martes que las conversaciones extraídas de unos teléfonos que están bajo investigación de la Fiscalía prueban presuntos vínculos entre su vicepresidenta, Verónica Abad -con quien está enfrentado- y el movimiento Revolución Ciudadana, liderado por el expresidente Rafael Correa (2007-2017).
La Fiscalía ha divulgado conversaciones extraídas de los teléfonos confiscados supuestamente al destituido exconsejero Augusto Verduga, del Consejo de Participación Ciudadana y Control Social (CPCCS), quien ha sido procesado por el presunto delito de asociación ilícita, junto a otros dos exconsejeros y una consejera, todos vinculados al correísmo.
En una de esas conversaciones, los participantes identificados bajo seudónimos, hablan sobre la elección de nuevos vocales del Consejo de la Judicatura (CJ), proceso para el que -al momento del diálogo- faltaba la terna del Ejecutivo.
“Compas. Aún falta que envíe la terna para el CJ el Ejecutivo ¿Le pedimos la terna a Abad? ¿Qué opinan?”, se lee en el mensaje, y aunque no se menciona directamente a Verónica Abad, Noboa -quien tiene un enconado enfrentamiento con a ella- asume que se trata de su vicepresidenta.
El mensaje del teléfono está fechado el 7 de enero de 2025, cuando Abad estaba en Ecuador reclamando su derecho a reemplazar temporalmente a Noboa en el cargo mientras él hacía campaña electoral para los comicios presidenciales del 9 de febrero, en los que pasó a segunda vuelta con la correísta Luisa González.
Pero Noboa solo se ausentó del cargo en ciertos días, en los que delegó su función a Cynthia Gellibert, a quien designó como vicepresidenta encargada al considerar que Abad incurrió en un “abandono temporal del cargo” por no haber viajado a Turquía en la fecha marcada por el Gobierno para desempeñarse como consejera de la Embajada, conforme le había encargado el mandatario.
En una entrevista con W Radio, Noboa dijo este martes que “hay cosas que preocupan mucho” de las conversaciones extraídas de los teléfonos y se refirió al diálogo en que se menciona el apellido Abad.
“Ahí está, dentro de los chats, ya había un plan para que Verónica Abad mande la terna del Ejecutivo para el Consejo de la Judicatura, y que el correísmo tenga control absoluto del Consejo de la Judicatura”, dijo Noboa.
Añadió que “poner a un correísta de delegado del Ejecutivo en el Consejo de la Judicatura es de terror”. “El ente regulador de los jueces, que esté controlado por el mismo correísmo, es preocupante”, sostuvo.
Control del Estado
El pasado fin de semana, durante la diligencia de formulación de cargos a los exconsejeros del CPCCS, el fiscal general adjunto, Wilson Toainga, señaló que los ahora procesados habrían utilizado sus cargos para proyectar un control del Estado a través de presuntos delitos, como tráfico de influencias, incumplimiento de decisiones legítimas de autoridad competente y usurpación de funciones públicas.
Entre estos actos se incluiría la designación de autoridades, como el superintendente de Bancos, presuntamente afines al correísmo.
En la entrevista radial, Noboa comentó que en las conversaciones reveladas “se ven conspiraciones, delitos, intentos de controlar varios poderes del Estado” lo que es “sumamente preocupante”.
Correa ha calificado de “persecución” y payasada” a la acusación de la Fiscalía, mientras que para el Ministerio de Gobierno, las revelaciones de la Fiscalía pusieron de manifiesto “un plan para perpetuar el poder a través de maniobras encubiertas por parte de la ‘liga azul'”, nombre con el que se conoce al grupo de los cuatro procesados en el caso ‘Ligados’, cuya audiencia se dio a menos de un mes de la segunda vuelta presidencial, prevista para el 13 de abril.
“La trama delictiva de la ‘liga azul’ -dijo el mismo Ministerio – evidencia los nexos de la vieja política en las instituciones democráticas y en la justicia para desestabilizar al Gobierno y dar un golpe de Estado azul”.