Nuevo fondo global busca frenar la tala con pagos de cuatro dólares por hectárea de selva

Fotografía de archivo del 28 de noviembre de 2013 de arboles talados en la selva amazónica (Brasil). EFE/ Marcelo Sayão ARCHIVO

São Paulo, 13 ago (EFE).- El Gobierno brasileño lidera el diseño de un fondo global para frenar la deforestación con pagos de cuatro dólares por cada hectárea de selva bien conservada, un mecanismo inédito que debe ser lanzado en la próxima Conferencia sobre el Cambio Climático de la ONU (COP30).

El Fondo Bosques Tropicales para Siempre (TFFF, por sus sigla en inglés), cuyos detalles están siendo finalizados, espera movilizar 125.000 millones de dólares de gobiernos e inversores privados, según la propuesta brasileña.

Ese monto será reinvertido en bonos soberanos o títulos de grandes empresas, por los que se estima conseguir un retorno de 4.000 millones de dólares anuales para repartir entre más de setenta naciones tropicales, desde Colombia a Indonesia, a cambio de preservar sus bosques.

“Va a recaudar un volumen de recursos que nunca antes fue destinado a las selvas”, dijo Leonardo Sobral, responsable del área de bosques de Imaflora, una ONG brasileña dedicada a la gestión sustentable.

Al alimentarse de los intereses de sus inversiones, y no de donaciones puntuales, la idea es que el TFFF se sustente solo y garantice pagos de forma permanente a los países receptores.

“Da previsibilidad; no es dinero que tienen un año sí y al siguiente no, sino que va a servir para hacer planes de conservación a más largo plazo”, aseguró Sobral, quien ha participado en las discusiones sobre el mecanismo con el Gobierno brasileño.

En el caso de Brasil, cuyo territorio alberga cerca de dos terceras partes de la Amazonia, las autoridades calculan que el país puede llegar a recibir anualmente unos 900 millones de dólares.

Esta cifra es casi cuatro veces mayor al presupuesto destinado este año al organismo responsable de los parques nacionales brasileños.

A diferencia de otros instrumentos que financian proyectos concretos previamente acordados con el donante, la propuesta actual del TFFF da más flexibilidad a los países receptores.

En el documento de presentación se propone, sin mucho detalle, que los recursos vayan a programas de conservación y que un 20 % sea destinado a comunidades locales o indígenas.

Monitoreo satelital

Fotografía de archivo del 28 de noviembre de 2003 de árboles talados en la selva amazónica (Brasil). EFE/ Marcelo Sayão / ARCHIVO

Pese a la flexibilidad en el uso del dinero, se evaluará, con la ayuda de sistemas de monitoreo satelital, el desempeño de cada país en función de su índice de deforestación anual, que no podrá elevarse por encima del nivel registrado en el momento en el que el país entre al mecanismo.

Igualmente, habrá penalidades en caso de incumplimiento: por cada hectárea deforestada se dejará de recibir un pago equivalente a entre 100 y 200 hectáreas y por cada hectárea degradada por incendios, el descuento será igual al pago de 25 hectáreas.

A tres meses de la COP30, que se celebra en la ciudad amazónica de Belém (norte de Brasil), el Gobierno brasileño trabaja a marchas forzadas con el fin de lograr un compromiso financiero abultado para anunciar el día del lanzamiento del TFFF.

Según Brasil, varios países desarrollados han expresado interés en invertir, aunque falta por ver si eso se materializa antes de la conferencia.

El director ejecutivo de WWF Brasil, Mauricio Voivodic, dice que es un plazo de tiempo “corto”, sobre todo teniendo en cuenta que es un mecanismo diferente a los que existían hasta ahora.

“Es tan innovador que muchos países aún no saben cómo dirigir los recursos, porque no es una donación, sino una inversión”, afirmó el ejecutivo del organismo medioambiental.

Para la adhesión de gobiernos y empresas también serán fundamentales las evaluaciones que las agencias de calificación hagan del TFFF, algo que se espera para septiembre, según Voivodic.

“El fondo puede ser un legado muy importante de la COP30, pero el trabajo para ponerlo en marcha va a continuar después”, dice el directivo de WWF Brasil.

La gestión de bosques es uno de los temas que se discutirán en el III Foro Latinoamericano de Economía Verde, que organizará la Agencia EFE en São Paulo el próximo 4 de septiembre.

El evento, que reunirá a autoridades y expertos para discutir los retos de la crisis climática, está patrocinado por ApexBrasil, la agencia brasileña de promoción de las exportaciones e inversiones, y las empresas Norte Energía y Lots Group, y cuenta con el apoyo de la universidad IBMEC, del Observatorio del Clima y de Imaflora. EFE