Lorena Rodríguez de la Torre
O Carballiño (Ourense), 5 ago (EFE).- Sin rival en el corte del pulpo, un año más la localidad ourensana de O Carballiño ha vuelto a exaltar el cefalópodo con una tapa gigante elaborada con seiscientos kilos y servida en un plato de madera de pino de 5,37 metros de diámetro.
Desde que en 2016 arrebató el récord Guiness de la tapa más grande del mundo a Bilbao, la localidad gallega se ha convertido en la meca de peregrinación para degustar el pulpo.
En esta ocasión, los pulpeiros han conseguido prepararla en diez minutos tras cocer el pulpo. Un reto que, cada año, cuenta cobra mayor dificultad. Han sido diez kilos más que en la anterior edición, aunque el tamaño de plato de madera se mantiene en 5,37 metros de diámetro.
Lejos quedan esos cien kilos que los pulpeiros trocearon en el primer ejercicio, hace ya quince años.
Para la elaboración de la tapa, más allá del troceado del pulpo, un buen condimento es fundamental: en total, más de 54 litros de aceite, ocho kilos de sal y algo más de tres kilos de pimentón dulce y salado.
El resultado son largas colas, una vez culminada la tapa, para adquirir una ración, que se vendió por un precio de siete euros, un precio muy asequible dado el precio actual del pulpo en cualquier restaurante.
La tradición de comer el cefalópodo se remonta a la Edad Media, debido a la proximidad de la villa con el monasterio de Oseira, que recibía pulpo para los monjes. A lo largo de los siglos se extendió por las ferias y mercados de Galicia.
En declaraciones a EFE, Jesús Pereira, pulpeiro que atesora una larga tradición familiar, destaca la exquisitez de este manjar y su versatilidad.
Para este pulpeiro, el secreto principal radica, primero, en una buena materia prima. «No sólo consiste en cocerlo y cortarlo, sino que hay todo un trabajo detrás», reivindica. También es importante «saber escoger» un buen pulpo.
El siguiente paso, es «tratar bien el producto» y, por último, un buen aderezo, a base de sal, aceite y pimentón.
«Si tienes la suerte de haber visto a tus abuelos y madres, es más fácil saber trabajarlo», apunta Pereira, quien cree que el pulpo siempre «estará de moda».
La previsión de la Asociación de Pulpeiros do Carballiño es repartir 1.800 tapas entre los asistentes.
El domingo, la fiesta

Este acto tendrá continuidad este domingo con la celebración de la tradicional Fiesta del Pulpo y la presencia de una delegación italiana de Noventa Padovana, hermanada con O Carballiño por el pulpo.
«La Fiesta del Pulpo es la mayor fiesta gastronómica del noroeste peninsular, con el pulpo como protagonista, lo que la convierte en una romería única», señala a EFE el concejal de Cultura, Diego Fernández, quien ha destacado la importancia que tiene este producto, cuya fiesta está declarada de Interés Turístico Internacional.
Desde julio, la localidad ourensana ya ha notado la «presencia de numerosos visitantes» para disfrutar de la agenda festiva y su producto estrella.
