Buenos Aires, 5 jul (EFE).– El secretario general de la Organización de Cooperación del Sur (OCS), el saudí Manssour Bin Mussallam, dijo en una entrevista con EFE que “el sur tiene la responsabilidad histórica de articular una tercera vía de desarrollo” ante el fracaso del modelo impuesto.
Bin Mussalam participa en el Coloquio Gran Sur, que acoge la Universidad Nacional de Avellaneda (UNDAV), entre el viernes y este sábado en Buenos Aires, donde fue rotundo al afirmar que nos encontramos ante el fin del orden mundial, tal y como se ha conocido hasta ahora.
Sostuvo que «los modelos de desarrollo hoy no son sostenibles, han fracasado en muchos de nuestros países. El sur, lo que otrora fue llamado el Tercer Mundo, tiene la responsabilidad histórica de articular una vía de desarrollo», al destacar que el mundo pospandémico vive una «policrisis mundial».
«El mundo atraviesa un momento de desordenamiento. Hace décadas que sabemos que los equilibrios medioambientales se están deshaciendo, que los contratos sociales se están desarticulando y que las desigualdades siguen creciendo. Hoy proclamamos el fin de la ilusión”, afirmó a EFE Bin Mussallam.
El intelectual saudí consideró que no sólo «se está terminando un orden mundial, también las certezas que lo sostenían» y cuestionó: «La pregunta ya no es si ese orden va a sobrevivir, sino si somos capaces de que no sea solo un cambio de vientos, sino un cambio de rumbo”.
Identidad del sur
Bin Mussallam, subrayó que, a pesar de la gran diversidad cultural, histórica y política que caracteriza a los países del sur global, repartidos en América Latina, África y Asia, estos comparten trayectorias y desafíos similares.
“Nuestros tres continentes tienen en su memoria la colonización, el despojo, la resistencia”, destacó, para señalar que hoy se encuentran a la vanguardia del impacto del cambio climático, a pesar de que han sido los que menos han contribuido al deterioro ambiental global.
Otro desafío común es la deuda externa, una carga que, según Bin Mussallam, sigue limitando el desarrollo soberano del sur global.
“En 2021, nuestros países de América Latina, África y Asia colectivamente pagaron más de 400.000 millones de dólares en servicio de la deuda”, apuntó, al destacar que ese dato duplica la supuesta ayuda al desarrollo recibida el mismo año.
Nuevo orden mundial
El secretario general de la OCS insistió en que los países del sur no pueden seguir actuando de forma aislada frente a desafíos comunes como el cambio climático o el endeudamiento con organismos internacionales de crédito.
“Un país solo negociando con los acreedores no tiene suficiente apalancamiento. Cuando uno entra en una negociación de la cual no puede retirarse, eso no es una negociación”, afirmó.
Como respuesta a este escenario, celebró la creación, en 2023, “del primer y único club de deudores soberanos frente al Club de París”, que busca dar una herramienta concreta de acción conjunta a los también llamados países en desarrollo.
“Como ciudadanos del sur, pensamos casi instintivamente que el multilateralismo que hemos tenido hasta ahora no es igualitario. Es un multilateralismo orwelliano, como en ‘Rebelión en la granja’: todos los animales son iguales, pero algunos son más iguales que otros”, expresó.
Bin Mussallam abogó por construir desde el sur un nuevo modelo sustentable: “La tercera vía de desarrollo no es un modelo único que deba imponerse universalmente, es un río poderoso en el que fluyen múltiples corrientes soberanas pero simbióticas hacia el mismo horizonte”.
“El sur no tiene vocación de ser sepulturero de un orden mundial en decadencia. Lo nuestro es levantar lo nuevo, no en contra del norte, sino desde nuestras propias afirmaciones: soberanía, dignidad y derecho al buen vivir”, añadió.
En el Coloquio Gran Sur, con entrada libre y gratuita, participan conferencistas y expertos de más de 15 países del sur global, que tratan desafíos geopolíticos, integración cultural, apropiación tecnológica y nuevas arquitecturas de multilateralismo.
Laura Guarinoni