Pamplona, 21 sep (EFE).- Osasuna se ha ejercitado en Tajonar tras la derrota de ayer ante el Villarreal todavía sin Moi Gómez, jugador que no entró en la convocatoria y que hará todo lo posible por llegar al jueves ante el Elche.
Horas después de ver cómo todo el esfuerzo puesto en La Cerámica quedó en nada, la plantilla se ha vestido de corto para entrenarse en un triste domingo. El encapotado cielo de Pamplona iba en sintonía con las caras de un grupo de futbolistas que a punto estuvieron de rascar un empate en la casa del submarino.
La expulsión de Rosier en la primera parte comprometió a sus compañeros, a pesar del gol de Ante Budimir de penalti justo antes del descanso. El Villarreal apretó durante todo el segundo tiempo, viéndose recompensado con el segundo tanto de rebote cuando solo quedaban 5 minutos para el 90. Pese a ello, el equipo pudo empatar la cita por mediación de Raúl García de Haro, que se topó con un muro protagonizado por Luiz Junior.
Esta mañana, el conjunto rojillo, como es habitual en un día posterior a un encuentro, se ha ejercitado dividido en dos grupos de trabajo en función de los minutos disputados. Así, aquellos que más jugaron han realizado trabajo regenerativo, mientras que el resto han realizado además trabajo compensatorio.
Moi Gómez y Aimar Oroz han continuado con sus respectivos trabajos de recuperación. El segundo de ellos será baja las siguientes jornadas, sin fecha aproximada para su vuelta, mientras que Moi espera meter más intensidad en los dos días que quedan de entrenamientos para llegar en condiciones a la cita del jueves en El Sadar.
Osasuna recibe a un Elche que ha comenzado de la mejor manera el campeonato a las órdenes de Eder Sarabia, undécimo clasificado con 6 puntos a falta de disputar su partido de este domingo contra el Oviedo en casa.