Islamabad, 27 ago (EFE).- Pakistán movilizó el Ejército este miércoles en la oriental y superpoblada provincia de Punjab para hacer frente a unas graves inundaciones que, según las autoridades paquistaníes, han sido provocadas por las lluvias del monzón y agravadas por la decisión de la India de liberar agua de dos de sus presas.
Las operaciones de rescate se han acelerado por orden del primer ministro, Shehbaz Sharif, mientras que más de 174.000 personas ya han sido evacuadas a lugares seguros en la provincia, informaron fuentes oficiales.
La acusación de Pakistán eleva la tensión bilateral y llega apenas tres meses después de que ambos países libraran un breve conflicto armado y de que la India suspendiera unilateralmente el Tratado de Aguas del Indo, un acuerdo de 1960 que regulaba la gestión de los ríos compartidos.
La Autoridad de Gestión de Desastres de Punjab (PDMA) afirmó que la India abrió las compuertas de una presa en el río Ravi y advirtió de la liberación de agua de otro embalse, lo que ha provocado un aumento histórico del caudal en siete distritos, incluyendo los de las grandes ciudades de Lahore y Faisalabad.
Esta crisis local se enmarca en una devastadora temporada de monzón en Pakistán, que ha causado al menos 799 muertes en todo el país desde finales de junio en sucesos relacionados con las lluvias.
Hasta el momento, 174.074 personas han sido evacuadas a lugares más seguros en Punjab, según la oficina del mandatario paquistaní.
Pakistán es uno de los países del mundo más vulnerables al cambio climático, a pesar de contribuir con menos del 1 % a las emisiones globales de gases de efecto invernadero. El país ha experimentado patrones climáticos intensos y erráticos en los últimos años, como sequías, olas de calor y lluvias torrenciales que han causado pérdidas humanas y materiales a miles de personas.