Palma empieza a saldar su deuda con Joan Miró con cuatro exposiciones simultáneas

Manuel Segade, director el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, MNCARS, durante la presentación del proyecto 'Paysage Miró' formado por cuatro exposiciones simultáneas que se inauguran esta semana en la Lonja, la Fundación Miró, el museo Es Baluard y el Casal Solleric de la capital de las islas Baleares, y que servirán para homenajear al artista español Joan Miró en la ciudad insular mediterránea de Palma, donde vivió desde 1956 hasta su fallecimiento, en 1983. EFE/ Cati Cladera

Palma, 30 jul (EFE).- Palma empieza a saldar su deuda con Joan Miró, que vivió en la ciudad desde 1956 hasta su fallecimiento en 1983, con el proyecto ‘Paysage Miró’, cuatro exposiciones simultáneas que se inauguran esta semana en la Lonja, la Fundación Miró, el museo Es Baluard y el Casal Solleric para mostrar un centenar de sus obras durante medio año.

La exposición ha sido definida este miércoles en la presentación como «el acontecimiento cultural más importante desarrollado en Baleares en décadas y con más proyección internacional», en palabras de la presidenta del Govern balear, Marga Prohens.

En nombre de la familia del artista, su nieto Joan Punyet, de Successió Miró, ha agradecido el esfuerzo que ha hecho posible este «año Miró» por parte de las instituciones y personas que lo han organizado en Palma, donde «había una deuda pendiente por su amor hacia Mallorca» y era necesario «homenajear su generosidad y gran creación».

«Sin hacer ninguna crítica negativa al pasado, en este momento en particular sí que se ha hecho un esfuerzo que nunca se había llevado a cabo por el Govern, el Ayuntamiento de Palma, el Consell de Mallorca, el (Museo Reina) Sofía y la Sala Pelaires para que se dé tanta importancia no solo al artista sino también a la persona», ha dicho Punyet, que considera la muestra actual «mucho mas importante y ambiciosa que la celebrada hace 40 años» solo en la Lonja.

Punyet ha recordado que un jovencísimo Miró ya dibujó la Lonja en 1911, en 1945 estuvo pintando un cuadro de la Catedral y en 1956 se instaló en Palma, donde falleció en Cala Mayor y regaló sus talleres a la ciudad.

Con este proyecto, el nieto del artista considera reafirmado el eje que forman las fundaciones Miró de Barcelona, Mallorca y Mont-roig del Camp. «No quería marchar de este mundo sin ver el triángulo mironiano consolidado», ha afirmado.

Prohens ha abundado en la idea de que las islas debían «un reconocimiento a la altura de la figura, el artista, el creador, el hombre y el genio» y se lleva a cabo reivindicando «la cultura en mayúsculas y la belleza» y fomentando la investigación y análisis «de su maravillosa e irrepetible obra, haciéndola accesible», con «la exposición más completa que se ha hecho sobre la figura de Joan Miró».

Citando al propio Miró, Prohens ha reivindicado que «un objeto bonito no se ha hecho para cerrarlo en un museo» sino «para seguirlo hasta el fin del sueño».

El centenar de obras expuestas en Palma abraza prácticamente toda su trayectoria, desde 1916 a 1981, entre pinturas, esculturas, obra sobre papel, documentos y objetos del artista.

En la Fundación Miró, en ‘La chispa mágica’, se exponen objetos artísticos, herramientas del campo y otros elementos que le inspiraron, así como pinturas, esculturas y obras sobre papel realizadas tras instalarse en Mallorca en 1956 y se abordan sus relaciones personales y creativas con otros creadores del siglo XX como Picasso, Calder o Klee.

En Solleric, ‘El color y su sombra’ se centra en la relación que estableció entre pintura y escultura en su obra tardía y en el lenguaje particular de Miró, con las figuras esenciales de su universo creativo (mujeres, estrellas, pájaros).

Es Baluard acoge ‘Pintar entre las cosas’, que aborda la dimensión más radical y contemporánea de Miró y brinda una lectura del artista como figura clave en la evolución de la pintura del siglo XX a partir de una selección de obras de su última etapa y su exploración de nuevas formas de expresión plástica.

La Lonja acoge diez esculturas creadas entre 1949 y 1970, con ‘La fuerza inicial’, piezas de bronce del artista y su vínculo con el paisaje, entre las que destaca ‘Oiseau lunaire’ por la complejidad técnica que ha implicado trasladarla desde el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, MNCARS, ha explicado su director Manuel Segade.

Segade ha alabado el proyecto expositivo, modélico por la red de colaboración que ha supuesto, al que el Reina Sofía presta 53 piezas.

El alcalde, Jaime Martínez, ha asegurado que la muestra múltiple es la cita cultural y artística «más importante y significativa que ha tenido nunca la ciudad» y constituye «un homenaje emotivo, sincero y merecidísimo», basado en que «Palma es la ciudad mironiana por excelencia».

El proyecto está comisariado por el director de Es Baluard, David Barro; la responsable del Servicio de Conservación de Esculturas e Instalaciones del MNCARS, Carmen Fernández; la directora de la Fundación Miró Mallorca, Antonia Maria Perelló, y el director del Solleric, Fernando Gómez de la Cuesta.