Buenos Aires, 11 mar (EFE).- Parte de la defensa de los imputados en el juicio por la muerte de Diego Armando Maradona apuntó este martes contra dos de los acusados, el neurocirujano Leopoldo Luque y la psiquiatra Agustina Cosachov.
“Si hay responsabilidad penal en la muerte de Maradona, en todo caso deberán responder por ella Luque y Cosachov, y no quienes realizaban tareas administrativas o de gestoría en las empresas involucradas, ni los enfermeros”, afirmó Nicolás Fernando D’Albora, abogado de la médica Nancy Forlini, en la primera audiencia del juicio que lleva adelante el Tribunal del fuero Criminal N°3 de la localidad bonaerense de San Isidro.
Maradona transcurrió sus últimos días de vida, del 11 al 25 de noviembre de 2020, en un domicilio particular en la localidad de Tigre, en la periferia norte de Buenos Aires.
Fue trasladado allí luego de abandonar la clínica en la localidad bonaerense de Olivos en la que fue sometido a una intervención quirúrgica.D´Albora dijo que el acta de salida de la clínica “es la piedra angular de este debate”, en relación a la decisión de continuar el tratamiento de Maradona en un domicilio particular bajo condiciones deficientes.El defensor de la médica a cargo del área de cuidados domiciliarios de la empresa de salud Swiss Medical señaló también que el equipo “era formado por Luque y Cosachov” y que su clienta “no cumplió ni cumple un rol médico asistencial”.”No tengo dudas de que acá hubo un plan criminal para matar que Diego. Pero hay que ver quiénes participaron”, dijo Rodolfo Baqué, defensor del enfermero Ricardo Almirón, quien además habló de “dos bloques”, uno de ellos compuesto por gente que estuvo contratada por el entorno de Maradona.Diego Olmedo, defensor del psicólogo especialista en adicciones Carlos Diaz, alegó que su cliente no conocía ni Luque ni a Cosachov, por lo que es imposible hablar de una “asociación criminal” que lo involucre.Sobre la omisión de ordenar el ingreso de Maradona a un centro de rehabilitación, Olmedo argumentó que Maradona “no era peligroso para él o para terceros, como la ley exige para que pueda existir una ‘internación compulsiva'”.Leopoldo Luque, médico de cabecera de Maradona y principal imputado en la causa, fue acusado de no brindar una atención propicia al paciente, ni realizarle seguimiento; evitar convocar a especialistas e ignorar y menospreciar los síntomas y signos compatibles con insuficiencia cardíaca.Su abogada defensora, Mara Digiuni, aseguró que el médico siempre “actuó con responsabilidad” frente a la situación.”Mi asistido tenía un conocimiento profundo y actualizado de la salud de Maradona, fue su médico de confianza desde 2019 y al momento en que se decidió esta internación domiciliara no existían riesgos”, aseguró Digiuni.La psiquiatra Agustina Cosachov está acusada de “no administrar de manera adecuada la medicación a Maradona y desentenderse de los efectos” adversos y de “no encargarse personalmente de la reanimación del paciente”, entre otros cargos.La defensa, encabezada por Vadim Mischanchuk, dijo que “no hay relación de causalidad probada” entre la actuación de la psiquiatra y la muerte de Maradona.A su vez, la defensa del jefe de enfermeros Mariano Perroni, acusado de completar documentos con información falsa, dijo que su cliente se dedicaba exclusivamente a controlar los ingresos de los enfermeros a la residencia.Todas las partes defensoras adelantaron que pedirán la absolución de sus clientes.También está acusados el médico Pedro Di Spagna y la enfermera Dahiana Madrid, quien solicitó un juicio por jurado y será juzgada en un proceso aparte. EFEFlorencia Pessarini