Redacción deportes, 9 may (EFE).- El danés Mads Pedersen (Lidl Trek), en un final confuso y accidentado, tuvo el honor de estrenar la maglia rosa de la 108 edición del Giro de Italia tras imponerse en la primera etapa disputada entre Durrës y Tirana, con un recorrido de 160 km, en la que se clasificó tercero el venezolano Orluis Aular (Movistar) y Mikel Landa sufrió una dura caída a 5 km de meta que le llevó al hospital.

Pedersen (Tollose, 29 años), campeón del mundo en 2019 y recientemente ganador de la Gante Wevelgem, firmó con victoria y gran trabajo del Lidl en los puntos claves de la etapa, especialmente en la subidas del circuito en Tirana. En la recta de meta no tuvo rival y se impuso con un tiempo de 3h.36.24 por delante del belga Wout Van Aert (Visma) y del venezolano del Movistar Orluis Aular.
“Es una victoria especial, con la etapa y el rosa, una forma de devolverle al equipo todo el trabajo que ha hecho. Queríamos seleccionar el grupo y eso es lo que hemos hecho. He tenido piernas para ganar a Van Aert. Es el primer maillot de líder que consigo en una carrera.
Primera escapada y pequeño incidente de Ayuso
El Giro 2025, por primera vez en Albania, salió desde la Torre Veneciana, en Durrës, la ciudad más antigua del país, turística y animada que divisa el Mar Adriático. El pelotón se animó desde el banderazo de salida con la primera fuga. Un quinteto salió a la aventura con Van der Hoorn, Tarozzi, Verre, Tonelli y Moniquet.
Enseguida tomaron cartas en el asunto el Alpecin Deceuninck de Kaden Groves y el Visma de Van Aert, dos de los principales favoritos para estrenar la maglia rosa. El pelotón no quería asumir grandes diferencias con la fuga.
Aunque bajo control, tras superar el esprint intermedio de Elbassan el quinteto superó en cabeza el ascenso a Gracen (2a, 12,9 km al 5,3), pero con diferencias ya cercanas al minuto, en claro descenso. En la aproximación al puerto Ayuso tuvo un pequeño incidente que le obligó a cambiar de bicicleta. Un simple susto para el español.
Hubo revuelta en el descenso de casi 20 km de Gracen. Alessandro Verre trató de despegar en solitario, pero ya cerca del circuito de Tirana estaban él y sus compañeros de aventura sentenciados, mantenidos “al baño maría” por un pelotón que buscaba el desenlace al esprint.
En la capital albanesa, por primera vez huésped del Giri, iba a comenzar la pelea real por la etapa y la primera maglia rosa. El escenario un circuito con 2 ascensos a Surrel (3a. 7 km al 4,4), con la cima del segundo a 10 km de pura bajada hasta meta. En la primera escalada el pelotón ya rodaba junto. El belga Sylvain Moniquet, ya era primer líder de la montaña.
Lidl tensa en Surrel y elimina velocistas
El ritmo del Lidl de Pedersen y del Visma supuso un duro castigo para algunos velocistas. Magnier, Bennett, Kooij y Fretin se descolgaron en la subida, pronto eliminados por la gloria en Tirana. Visma perdió a su principal “guepardo”, pero le quedaba la baja de Van Aert, con dudas por un virus que le afectó en las últimas semanas, pero siempre a tener en cuenta.
El equipo “amarillo” tomó el mando en la bajada, y el Lidl de nuevo apretó el acelerador en el segundo asalto a Surrel con Carlos Verona de al frente de las operaciones. Otros 7 km de subida a ritmo elevado. Era importante estar delante para coronar la cota y tomar posiciones para el descenso a meta. Otro esprinter eliminado, Kaden Groves (Alpecin).
Landa se despide del Giro por una caída
El puerto estiró el pelotón, ya reducido. Muchos se quedaron en las cuestas de Surrel, pero los favoritos estaban delante, atentos. Los Roglic, Ayuso, Van Aert, Bernal, Carapaz y Pello Bilbao, entre otros, se marcaban ante las inminentes maniobras de llegada. En la cima pasó al frente el italiano Ciccone.
Zafarrancho hasta la última línea. Lidl terminó de asfixiar a gran parte del pelotón, quedando delante un grupo de 45 unidades que volaban a alta velocidad, abriendo incluso diferencias. Como se preveía, la etapa inicial del Giro no iba a ser un paseo de trámite.
El riesgo lo vivieron en forma de caída algunos corredores. Mikel Landa se dejó sus ilusiones a 5 km de meta por una fea caída que lo dejó tendido fuera de la calzada. El alavés se despidió de un Giro en el que había depositado grandes expectativas como líder del Soudal Quick Step. También cayó el australiano Jay Vine, uno de los gregarios de Ayuso en el UAE.
Pedersen se lleva el premio al trabajo de su equipo
Bora se puso en cabeza, más para proteger a Roglic que para luchar por la etapa. De eso se encargó de nuevo el Lidl, con la estrategia muy clara de antemano. El candidato era Pedersen y el danés no defraudó. Fue segundo en Flandes, tercero en la Roubaix, y su estado de forma es magnífico.
Pedersen, quien heredó en 2019 el maillot de campeón del mundo que llevó Alejandro Valverde, se puso por primera vez un maillot de líder.
Una maglia rosa que defenderá este sábado en la primera de las dos pruebas contrarreloj que tiene esta 108 edición. Una crono corta, de 13,7 km, que tendrá como escenario Tirana, la capital albanesa. En el recorrido una dificultad hacia mitad de trayecto, la subida a Sauk, pequeña cota de cuarta de 1.5 km al 4.9 por ciento. Probable cambio de maglia rosa. EFE
Carlos De Torres