Sevilla, 17 jun (EFE).- Neil Tennant y Chris Lowe, Pet Shop Boys para el mundo desde 1981, han pisado esta noche la Plaza de España de Sevilla en la apertura de su gira por España, ante un público entregado a las excentricidades del dúo británico, y en una de esas noches de calor para recordar en el sur.
Lejos de los escenarios con grandes juegos de luces y colores, en esta gira parece que se han inclinado por un diseño minimalista en la primera parte del espectáculo, sin que falten detalles como sus cascos con antenas de hormigas, que a Tennant le ha durado dos canciones puesto.
La noche andaluza no estaba para tener la cabeza cubierta, como tampoco para llevar una especie de gabardina a modo de guardapolvo, pero los dos no parece haber querido modificar el protocolo de la gira por mucho que el ambiente estuviese para ir en tirantes en el Icónica Santalucía Sevilla Fest, el festival que ha apostado por ellos como una de las estrellas de su edición de 2025.
Una apuesta que consiste en intentar llevar al directo su música electrónica, solos en el escenario hasta que llega ‘Left to my own devices’ y los músicos aparecen en escena. Hasta ese momento, Chris Lowe había llevado el peso de la música, tanto con su teclado como con efectos grabados.
Una pose que no cambia con los años

Esa canción, a la media hora de concierto, ha sido el punto de inflexión para que Lowe abandonase su casco hormiguero a cambio de una gorra. Eso sí, su rictus serio hasta la desesperación y sus gafas de sol le acompañan como un dogma de fe. A estas alturas, con 65 primaveras, no es cuestión de cambiar de modo de vida.
“Sevilla, qué calor”, ha lanzado Neil Tennant tras cambiarse de ropa y aparecer con un traje negro, que había que tener valor, un mensaje que también compartió en sus redes sociales horas antes de aparecer en la Plaza de España mientras hacía turismo y pasaba desapercibido en una ciudad acostumbrada como pocas a ver a gente de todo el mundo paseando por sus calles.
Ha animado al público recordando que se trataba de disfrutar recordando canciones que todos tenemos en la memoria, y en ese contexto están temas como ‘Se a Vida e’, ‘Domino Dancing’ o ‘Jealousy’.
Un antes y un después

Pero, por lo que sea, cuando el público se ha entregado del todo ha sido cuando han comenzado a sonar los primeros acordes de ‘Always on my mind’, que el dúo tuvo el acierto de versionar en 1987, 17 años después de crearla Johnny Christopher, Mark James y Wayne Carson.
El maxi single de aquella versión, con aquella intro de más de un minuto, queda para la historia de las grandes creaciones musicales de la humanidad, como el Bolero de Ravel, el Nessun Dorma de Puccini o el Thriller de Michael Jackson.
A partir de ahí, en un concierto que ha ido de menos a más, todo ha llegado rodado. ‘Heart’, ‘What have i done to deserve this’ o ‘It’s A Sin’ han caído por inercia sobre los oídos de los casi 16.000 que esta noche se han reunido en el Icónica Santalucía Sevilla Fest para ver cómo arrancaba la gira ‘Dreamworld: The Greatest Hits Live’, que celebra los primeros 40 años en la música de Pet Shop Boys.
Es una buena oportunidad esta gira para ver la evolución de una formación que cuenta con el reconocimiento del Libro Guinness de los Récords como el dúo más exitoso en la historia de la música del Reino Unido, con 44 sencillos en el Top 30 de su país, incluyendo 22 en el Top 10 y cuatro números uno.
Con ‘West end girls’ y ‘Being boring’ ha terminado la cita con Sevilla, y ahora cogerán la carretera en busca de nuevos destinos para una gira que les mantendrá lejos de casa buena parte del verano.
Fermín Cabanillas