Bogotá, 24 jul (EFE).- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, considera que las negociaciones de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN) están rotas por las constantes acciones violentas de esa guerrilla en la región del Catatumbo y en otros lugares fronterizos con Venezuela.
«Ustedes, al atacar a sangre y fuego a civiles de manera sistemática en el Catatumbo, rompieron las conversaciones de paz con mi gobierno», manifestó Petro este jueves en un mensaje en su cuenta de X.
El Gobierno de Petro y el ELN iniciaron conversaciones de paz en noviembre de 2022 en Caracas, pero desde hace un año esos diálogos están suspendidos por la poca voluntad de negociación de esa guerrilla lo que, en opinión del mandatario, «es una mala manera de terminar el ciclo de la insurgencia armada y revolucionaria de Colombia».
La crisis en las negociaciones se acentuó luego de que en enero pasado el ELN lanzara en el Catatumbo una ofensiva contra el Frente 33 de las disidencias de las FARC, en una disputa por el control territorial de esa vasta región del departamento de Norte de Santander, lo que dejó cerca de un centenar de muertos, incluidos civiles, y unos 60.000 desplazados.
Tras esos ataques, Petro aseguró que el ELN se ha dedicado al narcotráfico y dijo que escogieron «el camino de la guerra» con su Gobierno, acusación que reiteró este jueves.
«La decisión de romper ese proceso de paz por parte de ustedes, con la muerte de decenas de campesinos nortesantandereanos, se debió no a la necesidad de la revolución en Colombia, sino al mercado de las economías ilícitas que los hacen competir con armas por el control de territorios», expresó el mandatario.
El presidente, que en su juventud hizo parte de la guerrilla del M-19 y es un admirador de la figura del sacerdote Camilo Torres Restrepo, conocido como ‘el cura guerrillero’, que se juntó al ELN en los años 60 y murió en su primer combate con el Ejército, dijo que esa guerrilla se ha dejado llevar por «la codicia».
«El padre Camilo Torres Restrepo y su amor eficaz estaba con la vida. Ustedes se llevaron la bandera roja y negra a las bandas de la codicia: el detritus del capitalismo mundial. Por eso no fueron capaces de encontrarse y pactar la paz con Colombia y el gobierno del cambio», agregó en referencia a su administración.
Advertencia sobre secuestro de policías
Petro se refirió también al secuestro el pasado domingo de dos policías de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín) en el departamento de Arauca, también fronterizo con Venezuela, donde el ELN tiene mucho poder, y aseguró que esa guerrilla, que se atribuyó el rapto, es responsable de la integridad de los cautivos.
«Al ELN le informo que: 1. Los prisioneros son responsabilidad de la organización capturante. Son ustedes los responsables de las condiciones físicas y sicológicas de las personas bajo su poder. 2. La Dijin no hace inteligencia, es un cuerpo adscrito a la Fiscalía para la investigación judicial en procesos concretos dirigidos por fiscales y jueces», expresó.
El Frente de Guerra Oriental del ELN se atribuyó el martes el secuestro del subintendente Franki Esley Hoyos Murcia y el patrullero Yordin Fabián Pérez Mendoza, de quienes dijo en un comunicado que fueron «detenidos en acción de control territorial» en la carretera entre el municipio de Tame con la ciudad de Arauca, capital regional, cuando supuestamente hacían labores de inteligencia en la zona.
«No pueden pensar los integrantes del ELN en posibles salvoconductos para reuniones en el exterior si hacen víctimas a los agentes de la Interpol, que entre las funciones de persecución a organizaciones criminales internacionales, tiene la de cuidar las decisiones de gobiernos, para conversaciones de paz», agregó.
Los diálogos de paz con el ELN se han desarrollado siempre en el exterior, con ciclos de negociación en Venezuela, México y Cuba, razón por la cual los miembros del equipo de esa guerrilla han recibido salvoconductos para salir del país sin ser detenidos por las autoridades.