Philipsen cumple el pronóstico y estrena el maillot rojo

El belga Jasper Philipsen (Alpecin Deceuninck) celebra la victoria en la etapa inaugural disputada entre Turín-Reggia Di Venaria y Novara, de 186,7 km. EFE/Javier Lizón

Novara (Italia), 23 ago (EFE).- Puños apretados y gesto de felicidad para el belga Jasper Philipsen al imponerse al esprint en la primera etapa de la 80 edición de la Vuelta disputada entre Turín-Reggia Di Venaria y Novara, de 186,7 km, que le otorgó el honor de estrenar el maillot rojo de líder.

El belga Jasper Philipsen (Alpecin Deceuninck) celebra su victoria en la primera etapa de la Vuelta a España disputada este sábado entre Turín-Reggia Di Venaria y Novara, de 186,7 km. EFE/Javier Lizón

Privilegio que ya tuvo Philipsen (Mol, 27 años) en el Tour de Francia enfundándose el maillot amarillo en el estreno de Lille. El belga cumplió el pronóstico levantando los brazos con un tiempo de 4h.09.12, a una media de 45 km/hora.

El italiano Alessandro Verre (Arkea) en el podio con el maillot de líder de la clasificación de la montaña tras la primera etapa de la Vuelta a España disputada entre Turín-Reggia Di Venaria y Novara, de 186,7 km. EFE/Javier Lizón

Philipsen rubricó con éxito un excelente trabajo de su equipo en los últimos km, poniéndole en posición cómoda para rematar la faena ante el británico Etan Vernon y el venezolano del Movistar Orluis Aular, quien se peleó con los grandes para subir al podio. Quinta plaza para Iván García y sexta para David González.

«Es un momento especial, supone el maillot rojo. Los compañeros me han colocado perfectamente, encontré la distancia y pude ganar. Ya estrené el amarillo en el Tour, por lo que esta victoria la recordaré siempre», dijo en meta Jasper Philipsen.

Primera fuga, los esprinters no perdonan su día señalado

Un bombón inicial para los velocistas, que no tendrán muchas opciones en esta edición. En el km 0 instalado en Turín junto al monumento del «campeonissimo» Fausto Coppi, el orgullo piamontés, y a orillas del río Po, se animó la carrera con los primeros fugitivos de la 80 edicion de la Vuelta, no sin antes ser despedido el pelotón por el Príncipe Alberto de Mónaco, quien también cortará la cinta en la Vuelta 2026, cuando la ronda salga del Principado.

Por las calles turinesas, donde se nota el mes de agostovacacional, salieron en estampida 6 hombres: Joel Nicolau (Caja Rural-Seguros RGA), Hugo de la Calle (Burgos Berpellet BH), Reinderink (Soudal), Nico Vinokourov (Astana), Bouwman (Jayco) y Verre (Arkéa). Ellos se repartieron los alicientes iniciales.

Verre se ganó el primer maillot de la montaña coronando La Serra (3a, 6,5 km al 5,2), el primero de los 46 puertos incluidos en la Vuelta del 90 cumpleaños, y Reinderink pasó en cabeza el primer esprint intermedio. La fuga empezó a ceder, pero el asturiano Hugo de la Calle, campeón de España sub’23 la pasada temporada, resistió en solitario hasta que lo devoró el pelotón a 38 km de meta.

Alpecin lleva en butaca a Philipsen hasta el maillot rojo

El ritmo y marcaje entre el Lidl de Pedersen y el Alpecin de Philipsen marcaron la persecución y el desenlace de la etapa. Estaba en juego el primer maillot rojo, botín importante teniendo en cuenta que los esprinters alzarán poco la voz en una Vuelta plagada de finales en alto. Maniobras inequívocas de los equipos de ambos aspirantes a quitar el precinto al jersey de líder.

También asomaron en cabeza por las carreteras que rodeaban los arrozales de Novara los equipos de los favoritos de la general, Visma y UAE, pero éstos con otro objetivo, buscar la zona de seguridad para Vingegaard y el dúo Ayuso-Almeida, nada interesados en meterse en batallas innecesarias.

Nervios y descontrol en los últimos 10 km. Ningún equipo montó un «treno» colectivo y varios equipos se sumaron a la caza de la mejor posición para su velocista. Movistar se apuntó a las papeletas ganadoras para el venezolano Orluis Aular.

Lucha sin cuartel, movimientos de riesgo. Alpecin no quería permitir que otros equipos dirigieran las operaciones con el pelotón a más de 60 por hora. Cabezas en el manillar, dientes apretados, watios elevados en los últimos instantes del primer asalto de la Vuelta.

Finalmente, después de varias incómodas rotondas, el Alpecin hizo un fino trabajo de colocación para Philipsen, quien al igual que hizo en el Tour, impuso su fuerza para ganar la etapa y ponerse el maillot de líder. Objetivo cumplido para el velocistas belga, quien cuenta 10 éxitos en el Tour y ya 4 en la Vuelta en un palmarés que refleja 55 victorias, 3 en la presente temporada.

Segunda etapa, primera meta en alto

Este domingo se disputa la segunda etapa entre Alba y Limone Piamonte, de 159,5 km. Jornada llana, pero con el primer aliciente de la presente edición, ya que la jornada termina en alto, nada menos, a las primeras de cambio, que una subida de 9,8 km al 5,1 por ciento de pendiente media y tramos del 10. Puede se la primera toma de contacto para los hombres de la general.

Carlos de Torres