Piastri lidera, Alonso ilusiona y Verstappen acecha

Oscar Piastri. EFE/EPA/FAZRY ISMAIL

Madrid, 3 oct (EFE).- El australiano Oscar Piastri (McLaren), líder del campeonato, marcó el mejor tiempo este viernes en los entrenamientos libres para el nocturno Gran Premio de Singapur, el decimoctavo del Mundial de Fórmula Uno. En el circuito urbano de Marina Bay. Donde los españoles Fernando Alonso (Aston Martin) -el mejor del primer ensayo, de día- y Carlos Sainz (Williams) se inscribieron cuarto y octavo, respectivamente, en la tabla de tiempos.

Fernando Alonso. EFE/EPA/FAZRY ISMAIL

Piastri, de 24 años, marcó el mejor tiempo de la jornada en el segundo libre, por la noche y en condiciones similares a las de la calificación de este sábado y de la carrera dominical. El líder del Mundial cubrió los 4.927 metros de la calurosa y húmeda pista singapurense en un minuto, 30 segundos y 714 milésimas, 132 menos que el debutante francés Isack Hadjar (RB) y con 143 sobre el cuádruple campeón del mundo neerlandés Max Verstappen (Red Bull). Tercero en la general -a 69 de los 324 puntos con los que lidera el australiano-; que viene de ganar las últimas dos carreras y que repitió en la sesión nocturna el tercer puesto de la vespertina.

Max Verstappen. EFE/EPA/FAZRY ISMAIL

Alonso -que había sido primero de día, en la pista en la que festejó dos de sus 32 victorias en la categoría reina (2008 y 2010)- marcó el cuarto tiempo de la sesión nocturna, en la que todos completaron sus mejores vueltas y en la que se rodó menos, a causa de dos interrupciones, con bandera roja, provocadas por los accidentes -sin lamentar daños personales- del inglés George Russell (Mercedes) y del neozelandés Liam Lawson (RB).

El piloto español Carlos Sainz Jr (Williams), en acción durante la jornada de entrenamientos libres del Gran Premio de Singapur, disputada este viernes en Marina Bay. EFE/TOM WHITE

El doble campeón mundial asturiano se quedó a 163 milésimas de Piastri, que lidera el Mundial con 25 puntos de ventaja respecto a su compañero, el inglés Lando Norris, que acabó con el quinto tiempo del día, a 48 centésimas.

Sainz -que viene de firmar su primer podio con Williams, al acabar tercero en Azerbaiyán hace dos domingos- repitió con luz artificial el octavo puesto logrado de día en el circuito en el que hace dos años logró uno de sus cuatro triunfos en la categoría reina; en el que se quedó, asimismo con las gomas blandas, a 585 milésimas de Piastri. En una jornada en la que el otro hispanohablante, el argentino Franco Colapinto (Alpine), repitió decimonoveno crono y acabó la jornada a dos segundos y 425 milésimas de la nueva estrella ‘aussie’.

No por ser menos trascendente -ya que se desarrolló de día, en un Gran Premio en el que tanto la calificación, como la carrera, se disputarán por la noche y con luz artificial-, el primer entrenamiento dejó de ser interesante. Al menos a ojos de la afición española, que a mitad del mismo veía como lideraban provisionalmente la tabla de tiempos sus dos compatriotas.

A los 28 minutos, Sainz paraba el cronómetro en 1:31.812; un tiempo logrado con el neumático medio; y comandaba con 242 milésimas de ventaja sobre Alonso, que había efectuado su intento con idéntico compuesto.

En el instante en el que instaló neumático blando, el genial piloto asturiano (en una segunda juventud a los 44 años) se puso al frente de una clasificación que lideraría al final de la primera sesión. Mejorándose en una milésima. Con un crono de 1:31.116, que aventajó en 150 milésimas al monegasco Charles Leclerc (Ferrari) y en 276 a ‘Mad Max’; tercero, al igual que los anteriores, con las gomas blandas.

Sainz no usó ese compuesto y acabó con el tiempo logrado con el medio, a 696 milésimas de Alonso; en una sesión en la que Piastri había marcado el quinto crono (a 365 milésimas) y un puesto por delante de Norris, que se quedó a 582.

Los dos pilotos de la dominante McLaren, que en este Gran Premio deberían revalidar el título de constructores -les basta con sumar trece puntos entre ambos-, se ordenaron en la primera tabla de tiempos por detrás del séptuple campeón del mundo inglés Lewis Hamilton (Ferrari), que concluyó cuarto de día, a 364 milésimas del crono de Alonso.

Sir Lewis -que acabaría décimo (a 777 milésimas) la jornada y cuyas cuatro victorias en Marina Bay sólo mejora, con cinco, el alemán Sebastian Vettel- había sido noticia durante las jornadas previas. Primero, por oponerse públicamente al genocidio perpetrado por Israel en Gaza; y después, a causa del fallecimiento de su perro Roscoe, un simpático bulldog que era famoso en el paddock -al que entraba con su correspondiente acreditación- y cuyo deceso provocó múltiples reacciones de condolencia desde todos los ámbitos de la F1. Pésames que agradeció nada más llegar a Singapur el astro británico.

El bonaerense Colapinto había sido decimonoveno por la tarde -a dos segundos y dos décimas de Fernando- y repitió esa posición por la noche -a dos segundos y 425 milésimas de Piastri-.

La FIA había decretado ‘riesgo de calor’, (curiosamente) por primera vez desde que se disputa un Gran Premio, a 140 kilómetros del ecuador y que debutó en el calendario en 2008 -con triunfo de Alonso-; pero en el que, de momento, las condiciones no están siendo tan extremas como en años anteriores.

El primer ensayo acabó con 29 grados centígrados ambientales, 34 en el asfalto y un 78 por ciento de humedad. El segundo, con 28 en el aire, 33 en la pista; y con un porcentaje de vapor de agua inferior en cinco puntos al del anterior.

La segunda sesión estuvo interrumpida, con bandera roja, durante algo más de diez minutos y poco antes de alcanzarse los primeros 20, a causa del accidente de Russell -cuarto en el Mundial, a 112 puntos-, que ‘perdió’ la parte trasera de su Mercedes y se accidentó en la decimosexta de las 19 curvas, perdiendo el alerón delantero del mismo.

Poco después de reanudarse, el ensayo quedó de nuevo en ‘stand by’, al ondear una nueva enseña carmesí. Esta vez, provocada por el accidente -por suerte, también, sin lesión alguna- de Lawson, que perdió el control del RB, dañando toda su parte derecha y perdiendo el neumático delantero de ese lado, en la salida de la 17. Una zona desde donde la grúa tuvo que retirar de pista el coche del oceánico, que se estrelló justo cuando Alonso venía fuerte -con mejor tiempo en los dos primeros sectores-, abortando por ese motivo su intento.

Estos dos percances impidieron que se rodara más en la sobre el papel principal sesión del día. En la que hubo un tercer incidente justo después, cuando, a la salida del pit lane, Norris dañó el alerón delantero al estamparlo contra el muro tras ser prácticamente arrollado por Leclerc -noveno al final-.

El monegasco también pretendía salir demasiado deprisa de su garaje, en un claro ‘unsafe release’ que fue investigado y que podría acarrear algún tipo de penalización.

Al final, prácticamente media sesión se fue al traste. Y en los últimos diez minutos, Alonso ilusionó con una vuelta rápida, antes de ser mejorado por Piastri, por el ‘rookie’ Hadjar y por un Verstappen que si no está a tiempo de luchar por un quinto título seguido, desde luego que va a animar -y podría ser indirecto juez en- la resolución del Mundial.

El tercer y último entrenamiento libre se disputará este sábado, horas antes de la calificación, que ordenará la formación de salida de la carrera dominical; prevista a 62 vueltas, para completar un total de 305,3 kilómetros. En la que no hay que descartar la entrada de algún coche de seguridad y que, en condiciones normales, se debería resolver a una parada. En una pista en la que, curiosamente, nunca ha ganado aún el siempre voraz ‘Mad Max’.

Adrián R. Huber