Ciudad de México, 25 sep (EFE).- Organizaciones civiles exigieron este jueves a la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) de México que la próxima actualización de la NOM-163-SEMARNAT-SCFI-2023, que regula las emisiones de CO2 y la eficiencia energética de los vehículos ligeros, se diseñe con “la máxima ambición climática” y sin concesiones a la industria automotriz.
El Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA), el Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP) y El Poder del Consumidor (EPC) advirtieron en un comunicado que, en el pasado, la norma fue debilitada por mecanismos de flexibilidad que anularon su efectividad, lo que impidió que México avanzara en la reducción de emisiones del sector transporte.
Señalaron que la presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, incluyó en su Plan de 100 Puntos la modernización de la regulación ambiental como parte de la transición hacia una economía baja en carbono. En ese marco, la NOM-163 es considerada estratégica para que el país cumpla con sus compromisos internacionales.
Las organizaciones propusieron establecer metas alineadas con el Pacto de Glasgow y con la electrificación prevista para 2030 y 2035. También pidieron eliminar créditos y flexibilidades “vacíos” que permiten a las corporaciones cumplir en el papel sin reducir emisiones reales, así como garantizar la transparencia mediante datos abiertos y trazabilidad de los vehículos.
“La NOM-163 debe convertirse en una verdadera herramienta climática y ambiental. Debemos recordar que los derechos humanos como el medio ambiente sano y la salud no deben condicionarse a criterios puramente económicos”, afirmó Anaid Velasco, del CEMDA.
El ITDP y EPC subrayaron que una norma más estricta no solo es un instrumento climático, sino también una medida de justicia social, pues los hogares de menores ingresos son los más afectados por el gasto en combustible y por la mala calidad del aire.
“México tiene todas las condiciones comerciales y tecnológicas para adoptar estándares de eficiencia ambiciosos. Nuestras plantas exportan a países con normas más estrictas, lo cual es vergonzoso”, dijo Bernardo Baranda, del ITDP.
Según las organizaciones, México sigue rezagado frente a Estados Unidos y Canadá. Para 2027, un automóvil nuevo en México consumirá en promedio un 3 % más gasolina que en EE. UU., mientras que las flexibilidades permitidas por la norma mexicana duplican las de ese país.
El cumplimiento de la nueva Contribución Determinada a Nivel Nacional (NDC) de México ante la ONU dependerá en buena medida de que la NOM-163 se fortalezca, señalaron.
“Hoy, la gran mayoría de los autos vendidos en México consumen más gasolina de la que deberían, lo que daña el bolsillo de las familias y el clima. La nueva NOM-163 es la última llamada para poner a los consumidores y el medio ambiente al centro de la política, no a los corporativos”, concluyó Stephan Brodziak, de El Poder del Consumidor.