Madrid, 1 sep (EFE).- El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha asegurado que «la lucha contra los efectos del cambio climático solo será posible de la mano de agricultores, ganaderos y silvicultores», que conforman un sector que es a la vez «vulnerable, pero estratégico».
Planas ha hecho esta afirmación durante su intervención esta mañana en el acto ‘Por un pacto de Estado frente a la emergencia climática’, en el que han participado otros ministros y que ha sido clausurado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
Respecto a ese pacto de Estado que promueve el Gobierno, Planas ha afirmado que es necesario para «proteger la vida en el medio rural y garantizar el futuro de todos» los españoles.
«La agricultura y la ganadería son esenciales para mantener vivos nuestros pueblos, generar empleo y cuidar el territorio. Protegerlos es proteger la vida en el medio rural y garantizar nuestro futuro, el de todos, el de las zonas rurales, pero también de las urbanas y del conjunto de España», ha señalado.
Ha sido contundente al afirmar que la «transición ecológica» es necesaria, pese a que «algunos se obstinan en verla como una realidad contraria de los profesionales del campo», porque es fundamental no poner en riesgo la «seguridad alimentaria» y la «estabilidad de los mercados».
Respecto a los incendios de este verano, ha defendido una buena explotación de los montes forestales «para ser menos vulnerables» y ha ensalzado el papel de la «ganadería extensiva» para el «control de la biomasa», así como par «proveer de otros servicios ambientales al medio rural».
Planas ha recordado que la aplicación de la actual Política Agraria Común (PAC) en España «dedica el 43 % de los fondos europeos de forma directa e indirecta a los objetivos medioambientales y climáticos».
Como ejemplo, ha puesto la figura de los ‘ecorregímenes’ de las ayudas de la actual PAC, «que incentivan el mantenimiento de cubiertas vegetales que contribuyen a fijar carbono y reducir la pérdida de suelo».
También ha hecho referencia a los 350 millones de euros de fondos para ayudas asociadas a la ganadería extensiva que se reparten cada año y a los incentivos para inversiones en agricultura de precisión que su departamento coordina y que persiguen un menor empleo de fertilizantes y fitosanitarios en la producción agrícola.
Planas ha defendido el regadío moderno con el que cuenta el sector primario español, en el que se invertirán hasta 2027 cerca de 2.500 millones de euros para su perfeccionamiento y para el aprovechamiento de aguas no convencionales y desaladas.
También ha puesto en valor el sistema de seguros agrarios español, «con más de 40 años de experiencia y que es un referente internacional», al que este año su ministerio dedica 315 millones, lo que permite cubrir el 40 % de los asegurados, y que «contribuye a mitigar los riesgos».
Sobre el seguro agrario ha resaltado que el Gobierno de España trabaja para que «la Unión Europea reasegure este magnífico instrumento».
Para hacer frente a la adaptación a los efectos del cambio climático, ha reclamado que se puedan utilizar las nuevas técnicas genómicas en la mejora vegetal con el objetivo de «conseguir plantas y semillas que puedan responder a mayores temperaturas y a menor disponibilidad de agua».
El ministro ha apostado porque la futura PAC cuente con «una buena dotación presupuestaria», para que agricultores y ganaderos puedan «mantener su vida y su actividad económica» y para que la «seguridad alimentaria» en la Unión Europea no corra peligro.