Sevilla, 8 jun (EFE).- El compositor sevillano Alberto Carretero (1985) estrenará su ópera de cámara «Poeta en Nueva York», sobre el poemario de Federico García Lorca, que considera «el culmen de la poesía en español y de la poesía universal» el próximo jueves en Sevilla, en el Espacio Turina, para el año próximo llevarla al Teatro de la Zarzuela de Madrid.
De esta ópera, que también será representada en el Festival Internacional de Música y Danza de Granada en fecha por determinar, ha dicho su creador que el poemario de Lorca lo fascinó desde que lo encontró por primera vez en el colegio y que nada más comenzar sus estudios de música -hoy es catedrático de Composición en el Conservatorio Manuel Castillo de Sevilla- ya soñó con ponerle música.
«En ‘Poeta en Nueva York’ se ha depurado la poesía de Lorca y se ha despojado de cualquier tinte costumbrista, de los recursos conocidos hasta el momento; puede ser una obra difícil de pensar como ópera, pero para mí, nada más leerlo, ya comprobé que tenía música y ritmo», ha dicho a EFE Carretero, quien ha trabajado en la partitura y el libreto desde 2023.
Esta ópera de cámara integra tres voces, la del barítono Javier Povedano, la del cantaor Sergio ‘El Colorao’ y la de Laura García Lorca, sobrina del poeta, que ha grabado sus intervenciones y que, según cuenta Carretero, inicialmente se sorprendió con la propuesta, porque es la primera vez que este poemario se lleva a la ópera, pero que, por ese mismo motivo, de inmediato «se entregó al proyecto».
Tres voces y un bailaor
La obra carece de personajes, ni siquiera aparece Federico García Lorca, sino estas tres voces que actuarán sobre «un cuerpo de baile» integrado exclusivamente por el bailaor flamenco Marcos Flores, ha explicado Carretero para afirmar que tampoco hay una narrativa lineal, «pero sí una dramaturgia y un interés dramático a través de la voz», apoyado exclusivamente en los versos del poeta.
«No hay personajes, hay alegorías, como en el teatro medieval o los autos litúrgicos; los personajes son alegorías pero ni siquiera alegorías de Federico, sino de la palabra del poeta, la palabra que se encarna en tres voces y un cuerpo», ha explicado el compositor sobre su primera aproximación como tal a una voz flamenca.
Esta voz flamenca la ha incorporado «no ligada a toda la tradición del flamenco, sino como abanico de posibilidades, de timbres, de expresiones, es un elemento más junto a la voz lírica y a la voz en ‘off’ de Laura García Lorca, que no se ve, pero que lo llena todo».
La obra integra también música electrónica -tanto grabada como en directo- pero no como una búsqueda ni un alarde de modernidad, sino con la naturalidad del diario quehacer de Carretero, quien también es ingeniero informático y ha estudiado Periodismo e Historia, ya que, como ha confesado, todo le interesa y nunca en su vida ha logrado aburrirse.
Un viaje iniciático
«La ópera lo aglutina todo, por eso es una palabra tan grande, ‘obra’, que significa todo y no significa nada», ha señalado el compositor al insistir en que otras obras teatrales de Lorca sí han sido llevadas a la ópera, pero no una obra no teatral como ‘Poeta en Nueva York», que en este proyecto contará con la música del Trío Arbós -violín, violonchelo y piano-.
«Detrás de todos esos poemas hay un viaje casi iniciático, un viaje interior del poeta a través de sus textos, de su palabra; en una carta a sus padres les escribió desde Nueva York que se miraba al espejo y casi no se reconocía», ha señalado Carretero, quien también ha incorporado al libreto parte de la correspondencia familiar del poeta y la conferencia que ofreció sobre su última obra después de su viaje a América.
La dirección de escena es de Rita Cosentino, el vestuario de Yaiza Pinillos y la escenografía de Alejandro Andújar, quienes han diseñado una escena «muy limpia» que se compone de una mesa desmesuradamente larga con una silla en cada extremo pero que pueden adoptar los perfiles más inesperados con la iluminación de David Bofarull, cuya intervención ha considerado fundamental el compositor. EFE
Alfredo Valenzuela