La Paz,. 17 jun (EFE).- Decenas de policías retirados y viudas marcharon este martes en La Paz para exigir que se identifique y castigue a los responsables de la muerte de cuatro agentes durante los bloqueos de caminos organizados por seguidores del expresidente Evo Morales para presionar por su candidatura presidencial.
«Todos los autores intelectuales, coautores y cómplices (de esas muertes) deben estar en la cárcel», dijo a EFE Saúl Bustillos, presidente de la Asociación Nacional de Suboficiales, Sargentos, Cabos, Policías, Administrativos, Reserva Activa, Jubilados y Viudas (Ansclapjupol).
Bustillos afirmó que los policías retirados están «totalmente indignados» por los últimos sucesos, ya que consideran que grupos de «narcotraficantes y terroristas» se infiltraron entre los bloqueadores y «han acribillado vilmente» a sus camaradas.
También cuestionó que a los policías se los envíe «como carne de cañón» a los bloqueos sin el debido equipamiento ni el «armamento de reglamento» para operar en contextos de conflictividad social.
Los policías jubilados y las viudas se movilizaron por el centro de La Paz hasta llegar a las puertas del Ministerio de Justicia, entre gritos que clamaban por una investigación eficaz y pancartas que señalaban a Evo Morales (2006-2019) como «asesino».
Frente al Ministerio, los participantes guardaron un minuto de silencio en homenaje a los fallecidos, acompañado por el toque de una trompeta.
Los bloqueos de caminos de los leales a Morales buscaban presionar al Tribunal Supremo Electoral para que inscriba la candidatura de su líder para las elecciones generales del 17 de agosto, a pesar de que este no tiene un partido político habilitado para participar.
El miércoles, tres policías murieron por heridas de bala mientras intentaban llegar a la localidad de Llallagua, en el norte del departamento de Potosí, donde manifestantes atacaron a pobladores que trataban de despejar las vías.
Otro agente perdió la vida en la región central de Cochabamba tras ser retenido por unos individuos que supuestamente activaron un explosivo adherido a su cuerpo.
A esto se suma el fallecimiento de un civil, presunto seguidor del expresidente, que manipuló mal un explosivo, y el de un joven universitario golpeado hasta morir tras ser acusado de ser un supuesto «informante de la Policía».
La semana pasada, el presidente Luis Arce ordenó la intervención de la Policía y el Ejército para desbloquear las carreteras, ante lo que consideró un intento por habilitar la candidatura «inconstitucional» de Morales y el impacto de la protesta en el alza de los precios de los alimentos.
El sábado, la Policía rindió honores póstumos a los agentes fallecidos en un acto en la Academia Nacional de Policías (Anapol), en La Paz, con la advertencia de que trabajará hasta identificar a los responsables.
Las protestas de los sectores afines a Morales consistieron en el bloqueo, durante dos semanas, de rutas que conectan el occidente con el oriente del país, acompañadas de demandas vinculadas a la situación económica, como la escasez de combustibles y divisas, además de la inflación.
Morales insiste en postularse a la Presidencia, pese a no contar con partido y a que el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) ratificó recientemente que la reelección solo está permitida «por una única vez de forma continua», sin posibilidad de un tercer mandato. Esto inhabilitaría a Morales quien ya gobernó Bolivia durante tres periodos.
El domingo, las organizaciones leales al exgobernante suspendieron los bloqueos como parte de una «pausa humanitaria», aunque aseguraron que continuarán con sus protestas.EFE
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