Lisboa, 13 ago (EFE).- El presidente de Portugal, Marcelo Rebelo de Sousa, alertó de que el próximo viernes será un día «especialmente preocupante» para la situación de los incendios por el pronóstico meteorológico que se espera, mientras que el país lucha este miércoles contra siete grandes fuegos.

Después de su reunión semanal con el primer ministro, Luís Montenegro, que este miércoles tuvo lugar en la localidad de Faro, en el sur del país, Rebelo de Sousa dijo a los periodistas que el viernes será «un día especialmente preocupante».

Esto porque «hay una convergencia de condiciones objetivas de naturaleza meteorológica y física que pueden apuntar a una situación muy propicia para que se mantenga o se agrave la situación desde el punto de vista de los incendios», agregó el presidente luso.
Por su parte, el segundo comandante de la Autoridad Nacional de Emergencias y Protección Civil (ANEPC), José Ribeiro, informó este miércoles en una rueda de prensa que son siete los incendios activos que preocupan a las autoridades, concentrados en el norte y el centro del país.
Uno de ellos arde en la zona de Vila Real, municipio que se ha visto afectado por las llamas desde hace más de 10 días.
Sin embargo, el que más medios tiene desplegados en este momento es el de Arganil, en la región de Coimbra, donde trabajan más de 700 bomberos. El fuego de Trancoso, en el distrito luso de Guarda, fronterizo con España, es el segundo donde más efectivos se concentran.
Los otros están localizados en Beiras e Serra da Estrela, otro en la zona de Tabuaço, en Viseu Dão Lafões y en Vinhais.
Un total de 2.261 bomberos, acompañados por 733 vehículos terrestres y 28 medios aéreos, tratan de extinguir las llamas en estos siete puntos.
Paralelamente, otros 50 incidentes están en resolución, informó Ribeiro, aunque siguen desplegados para atender estos fuegos más de 1.000 bomberos.
En cuanto a las víctimas, hasta las 17.00 hora local (16.00 GMT) hubo cuatro bomberos atendidos y otros siete que fueron evacuados a centros hospitalarios, de los cuales tres sufrieron un accidente con un vehículo.
La Guardia Republicana lusa informó que este miércoles permanecen cerradas tres vías debido a los incendios: la EN 323 entre las localidades de Távora y Granjinha, la EN 330 entre Penaverde y Maceira y la EN 226 entre los municipios de Cunha e Rio de Mel.