San Sebastián, 28 ago (EFE).- El lehendakari, Imanol Pradales, ha explicado este jueves que ayer llamó al presidente de la Junta de Andalucía, Juan Manuel Moreno Bonilla, y le dijo que estaba «confundido» porque Euskadi «no tiene reconocido el efecto de frontera norte».
Pradales ha informado de su contacto con el presidente andaluz durante su intervención tras presidir el primer Consejo del Gobierno Vasco del nuevo curso político, que, como dicta la tradición, se ha celebrado en el Palacio de Miramar de San Sebastián.
Moreno Bonilla pidió el pasado martes que se reconozca la situación de Andalucía como «frontera» en el reparto de menores migrantes y afirmó que el Gobierno favorece al País Vasco con este reconocimiento y a Cataluña con un reparto «simbólico».
«¿Cuantos entran desde Europa al País Vasco? ¿Cuántos van en patera cruzando desde Francia al País Vasco?», se preguntó Moreno, quien recordó que Andalucía sí está «a tiro de piedra» de África y ve cada día llegar pateras a sus playas.
Pradales ha explicado hoy que ayer llamó a Moreno Bonilla para «no polemizar porque hace falta menos ruido, más trabajo y más diálogo»».
Ha detallado que trasladó al presidente andaluz que «estaba confundido» porque no se ha reconocido el efecto de frontera norte a Euskadi, «¡Qué más nos gustaría!», ha apostillado.
El lehendakari ha señalado que considera «legítimo» y entiende que Moreno Bonilla quiera que se reconozca el efecto frontera sur de Andalucía «pero no a costa de decir lo que dice sobre Euskadi y con una información que no es adecuada».
En este sentido ha subrayado que el Gobierno Vasco «seguirá exigiendo» el reconocimiento de frontera norte porque «no es un capricho».
En seis años 40.000 migrantes han cruzado el paso de Irun, ha indicado Pradales que ha afirmado que cada vez que Francia cierra su frontera con el País Vasco causa «un efecto directo».
Además «se está provocando un cambio de los flujos de llegada de los menores no acompañados desde Francia hacia Euskadi porque ha habido un cambio de las políticas de las mafias en África», ha añadido.
Pradales ha señalado que pidió «apoyo y ayuda» a Moreno Bonilla a quien trasladó que el 50 % de los menores no acompañados llegan a Euskadi lo hacen en autobús, no en patera, y proceden «fundamentalmente de Andalucía».
Por ello «le pedí que colaborara para que ese fenómeno no se siga produciendo», ha dicho.
Ha explicado que ambos se pusieron de acuerdo para que la consejera vasca de Bienestar, Juventud y Reto Democrático, Nerea Melgosa, y la responsable del ramo en el Junta de Andalucía comiencen a hablar sobre este asunto.
«No voy a polemizar. Hay que trabajar más, generar menos ruido y no convertir en motivo de disputa política a personas que emigran, especialmente menores porque se trata de personas», ha añadido.