Barcelona, 30 mar (EFE).- Protección Civil ha levantado este domingo en Cataluña la alerta por viento y mala mar ante la previsión de que ambos fenómenos vayan a la baja progresivamente tras una jornada, ayer, en la que se anotaron rachas de hasta 136 kilómetros por hora en Boí (Lleida) y 642 incidencias, ninguna grave o que causase heridos.
El servicio Meteocat pronostica que este domingo será una jornada soleada en Cataluña, con algunas bandas de nubes altas. El viento, de componente norte en el Pirineo y la tramontana en la comarca gerundense del Empordà, seguirá soplando con rachas fuertes pero irá perdiendo intensidad progresivamente.
Meteocat mantiene el aviso amarillo por mala mar hasta el mediodía de mañana lunes en la costa del Empordà, donde podrían registrarse olas de 2,5 metros.
Ante ese escenario, Protección Civil ha desactivado la alerta por viento que mantenía activa desde el pasado viernes y ha rebajado al nivel de prealerta la de mala mar.
Viento muy fuerte en el Pirineo y Empordà
Protección Civil informa en un comunicado de que el viento ha sido especialmente fuerte en las cotas altas del Pirineo y en el Empordà (Girona).
Las rachas de viento más fuertes se han detectado en Boí, a 2.535 metros de altura, en la comarca de la Alta Ribagorça), donde alcanzaron los 136,1 kilómetros por hora (km/h).
En el santuario de Queralt, se anotaron vientos de 129,6 km/h; en Salòria, a 2.451 metros, de 128,9 km/h; y en La Tosa d’Alp, de 126,4 km/h.
En Portbou (Girona), el aire sopló a 123,8 km/h y en el pantano gerundense de Darnius-Boadella, también a 123,8 km/h. En Montsec d’Ares (Lleida) se registraron rachas de 122 km/h.
642 incidencias, sobre todo caída de árboles
Protección Civil ha informado de que, desde el inicio de la alerta por viento, en la mañana del pasado viernes y hasta la mañana de hoy, el teléfono de emergencias del 112 ha recibido 881 llamadas referidas a 642 incidentes, ninguno de ellos grave.
En casi todos los casos se informaba de caídas de árboles o de elementos de edificios, como tejas, barandillas o trozos de fachada, además de problemas en el tráfico por obstáculos en la vía.