Moscú, 20 jun (EFE).- El presidente ruso, Vladímir Putin, negó hoy en la plenaria del Foro Económico Internacional de San Petersburgo que el crecimiento del PIB ruso por encima del 4 % anual en 2023 y 2024 se deba únicamente al auge de la industria militar o la exportación de hidrocarburos.
«El crecimiento general del PIB no solo está vinculado al complejo militar industrial, como algunos piensan. Sí, naturalmente, el complejo militar industrial jugó su papel al respecto, pero debemos mirar atentamente cuál es la estructura de este crecimiento», dijo durante una intervención transmitida en directo por la televisión.
Aún así, reconoció que el complejo industrial militar ruso «avanza a buen ritmo».
«Las empresas del sector multiplicaron su producción y comenzaron a dominar la fabricación de nuevos tipos de equipamiento bélico», indicó.
Añadió que el incremento del PIB vinculado a los ingresos no provenientes del sector petrogasífero ruso fue del 7,2 % en 2023 y de 4,9 % en 2024.
«Se trata de cifras considerables, incluso superiores al PIB general. Dicho de otro modo, el aporte de los hidrocarburos a la dinámica de la economía en nuestro país ya no es tan determinante», sostuvo.
No obstante, destacó que Rusia tiene como objetivo «incrementar la exportación de hidrocarburos» frenada por las sanciones de Occidente, para lo cual desarrollará «las relaciones con sus socios, eliminará los obstáculos al comercio; abrirá nuevos nichos en los mercados; creará nuevas infraestructuras y profundizará la cooperación en materia de inversiones».
Putin resaltó que durante los últimos dos años se observó un crecimiento de sectores como la agricultura, la construcción, la logística, la esfera de los servicios, las finanzas y la industria de las tecnologías informáticas.
«Es decir, prácticamente todas las ramas de importancia clave para la economía nacional», aseveró.
Reconoció la influencia del «complejo entorno internacional» en la economía rusa, pero resaltó que «en los últimos dos años el PIB ruso creció más del 4 % anual, o sea, a un ritmo superior que la media mundial».
En ese contexto, llamó a «continuar desarrollando el mercado de la propiedad intelectual y en particular, ampliar las posibilidades de créditos de patentes y marcas comerciales».
Estos días ha estallado un debate público entre varios miembros del Gobierno ruso sobre la posibilidad de que la economía rusa entre en recesión.