Madrid, 15 sep (EFE).- La energía y las canciones de Raffaella Carrà trascienden generaciones como demuestra que en dos años se hayan estrenado dos musicales sobre la artista italiana, en 2023 ‘Bailo Bailo’ y el próximo 3 de octubre se subirá al escenario del teatro Capitol ‘Raffaella, el musical’.
Valeria Arzenton es la productora italiana que ha decidido volver a poner de actualidad a una figura tan querida del espectáculo.
Arzenton ha destacado este lunes durante la presentación que el musical habla de un icono que «ha atravesado el tiempo y varias generaciones de todo el mundo. Se trata de una obra atemporal», para la que el director Luciano Cannito ha reunido a un elenco joven, capitaneado por Lorena Santiago, que interpretará a Raffaella Carrà.
«En cuanto la vimos, supimos que era ella», asegura Arzentón, no sin que antes pasaran por la audición 200 intérpretes. Junto a ella, el elenco lo forman Robert Matchez, Chus Herranz, Paco García o Luana Carrera, compuesto por actores y cantantes internacionales de Italia, Brasil, Argentina y España.
La productora indica que siempre imaginó un musical que representara al género; un biopic sobre el nacimiento de la estrella que comienza cuando Carrà comienza su despegue en la televisión española y a partir de ahí los ‘flashback’ van desvelando el «nacimiento de una estrella mundial, llena de energía, emancipación, talento y belleza», que llegó al éxito con «sacrificio» y al azar de cruzarse con personas con las que se compenetraba artísticamente.
Luciano Cannito conoció a Raffaella Carrà, «amaba a España, el país de su corazón», y asegura que el musical es una historia real «de principio a fin»; un espectáculo de «generoso, lleno de amor y dinámico».
«No es una ficción ni un documental es un espectáculo emocional, un teatro que toca el corazón», incide.
Para la catalana Lorena Santiago, que ha participado en musicales como ‘A chorus line’ o ‘We will rock you’, este es su primer protagonista.
«Estoy muy feliz de tener esta oportunidad y de interpretar a una mujer icónica como Raffaella, en un espectáculo lleno de color y sentimiento y mucha verdad», concluye.
