Larra Belagua (Navarra), 2 sep (EFE).- El australiano Jay Vine (UAE) volvió a demostrar sus aptitudes de rey de la montaña con el segundo triunfo en solitario en la presente edición de la Vuelta, esta vez coronando brazos en alto la décima etapa disputada entre Arguedas y el alto de Larra Belagua, de 175,3 kilómetros, en la que recuperó el maillot rojo el danés Jonas Vingegaard (Visma).

Vine (Townsville, 29 años) volvió a ofrecer una exhibición marca de la casa para conquistar la cima que estrenó el belga Remco Evenepoel en 2023. Dentro de la fuga, atacó a 5 kilómetros de meta, atrapó al español Pablo Castrillo (Movistar) y se fue a meta para entrar con su maillot de lunares azules en solitario, con tiempo para saborear su cuarta victoria en la ronda.

El ciclista ‘aussie’ firmó la cuarta victoria para el UAE en plena tormenta entre la dirección del equipo y Juan Ayuso. El ruido lo redujo Vine entrando en meta sonriendo con su flamante bigote. Pasó la línea en 3h56:24, a una media de 44,5 km/hora. Le siguieron dos hombres del Movistar, Castrillo y Javier Romo, a 35 segundos y 1:04 respectivamente.
Los favoritos no lucharon por la etapa. Se hundió el noruego Torstein Traeen perdiendo la roja, que pasó a Vingegaard, cuyo grupo, con Joao Almeida, Thomas Pidcock, Matteo Jorgenson y Giulio Ciccone cruzó a 1:05. Ahora el danés supera en la general en 26 segundos a Traeen y en 38 a Almeida. El primer español es Marc Soler, decimotercero a 3:30.
La gresca entre Ayuso y el UAE protagoniza la salida
La décima etapa por territorio navarro desvió la atención hacia la gresca entre Juan Ayuso y el UAE por el comunicado del equipo -difundido la tarde anterior- donde anunciaba la baja del corredor a final de temporada.
El mensaje plagado de «faltas de respeto» con tintes de «dictadura», según las definió el ciclista, indignó a Ayuso, mientras que Joxean Fernández ‘Matxín’, director del cuadro emiratí, hablaba de «relación ejemplar» y lógica «separación de caminos».
El pelotón salió a la batalla disparado desde Arguedas, con los más modestos buscando la fuga desde el banderazo inicial. Mucha marcha, 51 kilómetros en la primera hora, pero el pelotón no permitió aventuras hasta pasado el ecuador de la carrera. Hubo caídas; en una de ellas quedó eliminado Raúl García Pierna, segundo español en la general.
Mientras llegaba la zona de montaña en la segunda mitad, el Visma probó al personal con una aceleración que rompió el pelotón a 80 kilómetros de meta. Los hombres de Vingegaard, con el danés al frente, amagaron, pero su intento sólo sirvió para que los rivales encendieran las alarmas.
La tranquilidad de la jornada tuvo su episodio reivindicativo al paso por Lumbier (km. 98), plagada de banderas palestinas, donde varios manifestantes irrumpieron en la calzada, sin provocar alteraciones destacadas. Eso si, algún corredor tiró de habilidad para sortear algún emblema.
Escapada tardía, pero definitiva
Tardó en formarse la escapada, pero al fin se formó a 60 de meta, con 30 hombres, camino del Alto de las Coronas (3a, 8,3 km al 4,4), primera dificultad de la etapa. En el proyecto Castrillo, Romo y Aular (Movistar), Kwiatkowski, Bjerg y Vine (UAE)… y ningún representante del Visma.
Romo optó por la vía épica atacando a 4,5 km de la cima. El manchego coronó con 2:45 minutos sobre el pelotón, pero más tarde la «fuga de la fuga» se consolidó con 8 corredores. El pelotón dio luz verde a la expedición. A 30 de meta estaba a 3:30 de cabeza de carrera, que daba la impresión de que iba a gestionar la victoria en Belagua.
Cuatro españoles en la pelea: Romo, Castrillo, Balderstone, campeón de España de crono, y Xabier Mikel Azparren. Vine entró para defender el maillot de la montaña y, por qué no, buscar la gloria en la cima navarra, lo que sería un chorro de agua para apaciguar el ‘incendio’ que vive su equipo.
Jay Vine, con su doblete, da la cuarta victoria al UAE
Al pie del puerto de Belagua (1a, 9,4 km al 6,3) llegó Alec Segaert (Lotto) con 40 segundos de adelantó. Los perseguidores no dieron importancia al ataque del belga, al que atraparon a 7,5 de meta con Castrillo en zafarrancho. El pelotón, dirigido por el UAE, redujo la renta de la fuga a 1:40. Ayuso levantó el pie en ese momento. También el líder Torstein Traeen, despidiéndose ya de la roja.
La pelea entre UAE y Visma ponía en peligro el éxito de la escapada, donde Castrillo se dejaba el alma por reeditar su doble éxito de 2024. El ciclista jacetano sucumbió a la visita de Jay Vine, quien le pasó como una exhalación para iniciar una cabalgada triunfal en solitario hasta meta.
Resistió Vine, rey de la montaña de la Vuelta 2024 y directo a repetir título. El ciclista ‘aussie’ no perdona cuesta arriba. Hizo inútil la presión del dúo del Movistar y del grupo de favoritos. Vingegaard y Almeida llegaron juntos. Partida en tablas, el danés de rojo y el portugués a la espera de oportunidades. Con la ayuda de Ayuso o sin ella.
Llega la ‘clásica’ de Bilbao
Este miércoles se disputa la undécima etapa con salida y meta en Bilbao, con un recorrido de 157,4 kilómetros que bien podría definirse como una ‘clásica’. Nada menos que 7 cotas que no darán respiro al pelotón de principio a fin.
La doble subida al Alto del Vivero (2a, 8,2 km al 3,5) y el Alto de Pike (3a, 2,3 km al 8,9), última dificultad del día, serán los puntos claves de una etapa que puede deparar sorpresas. EFE
Carlos de Torres