Islamabad, 26 jun (EFE).- Las autoridades de Pakistán rescataron este jueves a 160 personas que habían quedado atrapadas en un hotel del norte de este país durante una inundación repentina provocada por el derretimiento de un glaciar.
«Alrededor de 160 turistas y miembros del personal del hotel fueron rescatados en un bote después de que el agua de una inundación repentina entrara en las instalaciones de un hotel», informó a EFE el gerente de operaciones del servicio Rescue 1122, Tahir Shah, en la región montañosa de Gilgit-Baltistán, en la Cachemira administrada por Pakistán.
Según el Rescue 1122, la inundación repentina ocurrió tras el derretimiento de un glaciar en la zona del arroyo Burundubar, que desemboca en el lago Attabad, uno de los principales lugares turísticos de la zona montañosa del norte de Pakistán, donde se encuentran las cordilleras del Hindu Kush, del Karakórum y del Himalaya.
Entre las personas atrapadas en el alojamiento donde se produjo la inundación, el hotel Luxus, se encontraban turistas locales y extranjeros según las autoridades paquistaníes, que no han especificado sus nacionalidades.
Según Shah, la inundación también dañó árboles y terrenos.
Ayer, el Centro Nacional de Operaciones de Emergencia de Pakistán (NEOC) emitió una alerta de inundación por desbordamiento de lagos glaciares, un fenómeno conocido como Glof, para el norte de Pakistán, incluido Gilgit-Baltistán, por las altas temperaturas persistentes en la zona y las corrientes monzónicas intensificadas.
Según la alerta, el calor sostenido en las últimas semanas ha acelerado el derretimiento de la nieve y los glaciares del norte de Pakistán, que cuenta con más de 7.000 glaciares, 3.000 lagos glaciares y una de las mayores cantidades de hielo glaciar del mundo fuera de las regiones polares.
El derretimiento de glaciares provoca un aumento de los niveles de agua en las zonas bajas del norte del país e inundaciones río a bajo.
«La proporción entre glaciares y derretimiento ha aumentado en los últimos años debido al cambio climático y a factores humanos locales!, explicó a EFE el portavoz del Gobierno de Gilgit-Baltistán, Faizullah Farak.
Anteriormente, la zona recibía nevadas entre noviembre y diciembre, lo que convertía la nieve en hielo durante los siguientes meses. Sin embargo, los nuevos patrones provocan las nieves entre febrero y marzo, lo que conlleva que éstas no puedan convertirse en hielo con la celeridad suficiente debido al aumento repentino de las temperaturas en la zona a partir del mes de abril.
Según el NEOC, se espera que un episodio de lluvias asociadas al monzón continúe afectando al norte de Pakistán entre el 25 de junio y el 1 de julio.
En 2022, las inundaciones provocadas por lluvias monzónicas y deshielo de glaciares mataron a más de 1.700 personas y afectaron a más de 30 millones de personas.
Pakistán es uno de los países más afectados por el cambio climático persistente, que provoca además lluvias de alta intensidad, sequías y olas de calor.