Sánchez acuerda con la OTAN que España no gaste en defensa más del 2,1 % de su PIB

Captura de video de la declaración institucional del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este domingo en el Complejo de La Moncloa, en la que ha dicho que el acuerdo al que ha llegado con la OTAN para no gastar un 5 % del PIB en defensa permite a España cumplir los compromisos con la Alianza sin necesidad de incrementar su inversión en ese ámbito. EFE/Moncloa -SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)-
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Captura de video de la declaración institucional del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, este domingo en el Complejo de La Moncloa, en la que ha dicho que el acuerdo al que ha llegado con la OTAN para no gastar un 5 % del PIB en defensa permite a España cumplir los compromisos con la Alianza sin necesidad de incrementar su inversión en ese ámbito. EFE/Moncloa -SOLO USO EDITORIAL/SOLO DISPONIBLE PARA ILUSTRAR LA NOTICIA QUE ACOMPAÑA (CRÉDITO OBLIGATORIO)-
Madrid, 22 jun (EFE).- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha garantizado este domingo que España gastará el 2,1 % de su PIB en defensa, «ni más ni menos», tras lograr un acuerdo con la OTAN que la exime de llegar al 5 % que considera que era «desproporcionado, innecesario» e incompatible con el estado del bienestar. Sánchez ha hecho una declaración institucional en el Palacio de la Moncloa tras ese acuerdo al que ha llegado con la Alianza después de una negociación que se aceleró desde el pasado viernes, cuando trasladó al secretario general de la OTAN, Mark Rutte, su rechazo a llegar a ese porcentaje. Un cruce de cartas con Rutte ha sido el colofón de esa negociación que, según avala en su misiva el secretario general de la Alianza, permitirá a España flexibilidad para gastar en defensa por debajo del 5 % del PIB. Pero eso no impedirá a España cumplir con todas sus capacidades y compromisos con la Alianza y mantener la unidad de esta organización. Es lo que ha asegurado el jefe del Ejecutivo, quien ha recalcado que España ha pasado de un 0,9 % del PIB en gasto en defensa en 2018 al 2 % en este 2025, y eso le permite ser un actor clave de la arquitectura de seguridad de la Unión Europea, de la OTAN y de la ONU. Sánchez ha expresado su respeto a los países que quieran aumentar su gasto militar, y ha explicado que habrá una asimetría en la OTAN por la que no todos los aliados gastarán el mismo porcentaje y ha considerado que es algo «normal e inevitable». En el caso de España, según los técnicos de las Fuerzas Armadas citados por el presidente, España necesitará dedicar un 2,1 % de su PIB para mantener todo el personal, el equipamiento y las infraestructuras necesarias y para hacer frente a las amenazas y desafíos «Por tanto, el 2,1 %, ni más ni menos», ha subrayado el jefe del Ejecutivo, quien ha insistido en que gastar más sería «despilfarrar», y acercarse a un 5 % «de forma artificial» no ayudaría a alcanzar los objetivos. Sánchez ha afirmado que, con el acuerdo, España permanece dentro del consenso de la OTAN y se ha conseguido el pacto mediante una negociación diplomática «discreta, eficaz, honesta y justa». «España no va a gastar el 5 % de su PIB en defensa, pero su participación, peso y legitimidad en la OTAN siguen intactas, con todos los deberes, con todos los derechos que ello conlleva», ha añadido. Según Sánchez, haber aceptado ese gasto del 5 % conllevaría gastar unos 350.000 millones de euros adicionales hasta 2035 que sólo se conseguirían aumentando unos 3.000 euros anuales en impuestos a los trabajadores, eliminando las prestaciones por desempleo, enfermedad y maternidad, reduciendo un 40 % las pensiones o recortando a la mitad la inversión estatal en educación desde los cero años hasta la universidad. Y para justificar la asimetría en el gasto de los aliados, ha explicado que en algunos países el salario medio de un soldado es tres veces mayor que en otros, o que producir ciertas capacidades de defensa cuesta la mitad. El acuerdo ha dicho que es un éxito que garantiza también el éxito de la cumbre de la OTAN de esta semana, al tiempo que salvaguarda la soberanía de España y es bueno para el país y para la Alianza. Además, ha agradecido a Rutte y al resto de aliados de la OTAN el trabajo que se ha hecho para conseguirlo. El presidente del Gobierno se ha adelantado a críticas de «los heraldos del desastre y la mentira» que lamenten que el acuerdo rompa la unidad de la OTAN y deje a España fuera de su paraguas protector, para hacer hincapié en que los ciudadanos deben estar tranquilos porque nada de eso es cierto. Fuentes del Ejecutivo recalcan la relevancia del pacto, que explican que es un logro a semejanza de la denominada «excepción ibérica», la medida que, en el marco de la Unión Europea, permitió a España y Portugal rebajar el precio del gas destinado a generar electricidad.