Madrid, 12 jun (EFE).- El presidente del Gobierno y líder socialista, Pedro Sánchez, ha pedido perdón a los ciudadanos porque hasta este mismo jueves estaba convencido de la integridad del hasta ahora secretario de Organización del PSOE, Santos Cerdán, y ha anunciado una auditoría externa sobre las cuentas del partido en una comparecencia ante los medios que ha tenido las siguientes claves.
«Perdón», «decepción»…
Sánchez, muy serio en todo momento, ha pronunciado hasta una decena de veces la palabra «decepción», siete veces «perdón» y cuatro «disculpas», junto a otros términos como «indignación» o «tristeza».
«No existía ningún indicio»
– Ha asegurado que «hasta esta misma mañana» estaba «convencido de la integridad de Santos Cerdán», puesto que «no existía ningún indicio» de su participación en el caso Koldo y había considerado «veraces todas las explicaciones» que le había solicitado «previamente». Tampoco conocía el informe de la UCO hasta esta mañana.
– Esta tarde, conocidos ya unos indicios que no ha dudado en calificar de «muy graves», ha hablado con Cerdán y le ha pedido su dimisión como secretario de Organización «con efecto inmediato» y su renuncia al acta como diputado.
– El hasta ahora secretario de Organización le ha dado «sus explicaciones» y «ha defendido su inocencia», pero según Sánchez, a él no le corresponde juzgarle y «tendrá que ser la justicia quién dirima esta cuestión».
«No debimos confiar en él»
– Ha recordado que conoce a Cerdán desde 2014, por lo que han sido 11 años en los que ha trabajado con él «codo con codo», y por eso lo conocido hoy ha sido para él una «enorme decepción».
– «No debimos confiar en él», ha lamentado Sánchez, que ha argumentado que «desgraciadamente en este mundo no existe la corrupción cero», pero ha defendido que «sí debe existir la tolerancia cero cuando esta se produce».
«Eliminar cualquier sombra de duda»
– Otras medidas: Va a poner en marcha una auditoría externa sobre las cuentas del Partido Socialista «para eliminar cualquier sombra de duda que pueda tener, lógicamente, la ciudadanía», pese a que los informes del Tribunal de Cuentas «han sido siempre muy positivos»; y de cara al Comité Federal impulsará una reestructuración de la Comisión Ejecutiva Federal.
– No ha perdido la ocasión de diferenciar su reacción de la del PP respecto a «casos muy graves de corrupción que afectan a importantes personalidades» de esa formación, «como pueda ser un presidente o una presidenta autonómica, o «ex miembros», «exministros» o «responsables actuales».
Ni elecciones ni crisis de gobierno
– De cara al futuro, ha dejado claro que «convocatoria electoral no va a haber hasta 2027» porque esto no va ni de él ni del Partido Socialista ni de los diputados y diputadas del Grupo Parlamentario Socialista, sino que «en exclusiva va de un proyecto político que está haciendo cosas buenas» por España.
– Su «intención», ha informado además, «si así lo quieren los ciudadanos y los militantes, será concurrir a esos comicios cuando tocan, en el año 2027».
– Tampoco habrá ninguna crisis de gobierno, «en absoluto», ha zanjado, puesto que «esto no está afectando al Gobierno de España».
– El relevo de Santos Cerdán en la Secretaría de Organización no se conocerá hasta algo antes del Comité Federal del 5 de julio, cuando lo proponga para su ratificación por los delegados y delegadas.
Las primarias, un proceso «con absoluta garantía»
– Ha restado trascendencia a las palabras de Cerdán registradas en el informe de la UCO sobre una posible manipulación de votos en las primarias que le auparon como líder del PSOE: «Me parece que está hablando de dos votos», ha apuntado, cuando hay 130.000 militantes y en 2014 su victoria fue -ha dicho de memoria- por más de 17.000 votos.
– «Los procesos de primarias en el Partido Socialista son procesos con absoluta garantía», ha garantizado.
«Una triple responsabilidad»
– Desde un punto de vista personal, ha reconocido que, junto a sus virtudes, tiene «muchos defectos», pero siempre ha «creído y trabajado por la política limpia y por el juegos limpio en política».
– Ha manifestado en dos ocasiones que tiene «una triple responsabilidad»: la primera de ellas es actuar cuando se conoce un hecho «de esta gravedad»; en segundo lugar, como presidente del Gobierno, colaborar «absolutamente» con la justicia, «no entorpecerla»; y, finalmente, trasladar a la ciudadanía las «disculpas» y el «perdón».