Barcelona, 9 oct (EFE).- Exdeportistas como la tenista Arancha Sánchez Vicario y el jugador de balonmano Iñaki Urdangarin han participado este jueves en un acto de conmemoración del 25º aniversario de los Juegos Olímpicos de Sídney 2000, donde la delegación española logró once medallas.
El evento, celebrado en el Museo Olímpico y del Deporte Juan Antonio Samaranch de Barcelona, ha rendido homenaje a los logros de deportistas como María Vasco, bronce en los 20 kilómetros marcha, y Gervasio Deferr, oro en gimnasia artística, así como a todos los miembros de la delegación español que compitieron en aquella cita olímpica.
Durante el acto, los dos medallistas rememoraron sus recuerdos de Sídney (Australia), un evento que marcó un punto de inflexión en sus carreras.
«A mí no me queda otra que recordar esa llegada a meta, sin saber que estaba haciendo historia», ha explicado María Vasco, que se convirtió en la primera mujer española en lograr una medalla olímpica en atletismo.
«Apenas un kilómetro antes me habían comunicado que iba a ser medallista, y no me lo creía. Crucé la meta y hasta que no me colgaron la medalla por la noche no fui realmente consciente de lo que había sucedido», ha recordado la exatleta catalana.
Por su parte, Gervasio Deferr, doble campeón olímpico (Sídney 2000 y Atenas 2004), ha asegurado que sigue recibiendo muestras de cariño por parte de quienes lo vieron competir.
«Ahora tengo mi gimnasio en el barrio de La Mina (Barcelona), y me siguen viniendo padres que me vieron competir y traen a sus hijos. Mantienen ese recuerdo y ese cariño, y para mí es un verdadero placer», ha señalado.
El exgimnasta ha recordado también cómo vivió aquella final en la que se colgó el oro en Sídney. «En suelo fallé, quizá por exceso de confianza, pero en la final de salto supe gestionar los nervios. Hice mis dos saltos, mi trabajo… y al final me tocó ser medalla de oro», ha rememorado.
Por su parte, Sánchez Vicario, cuatro veces medallista olímpica, también ha recordado su experiencia en Sídney: «La realidad es que era final de carrera. Mis primeros Juegos fueron con 16 años y fue una experiencia inolvidable porque la primera participación se te queda grabada. Representar a tu país es algo increíble, y yo era la única jugadora tenista en esos momentos».
Durante el acto, muchos de los medallistas rememoraron sus recuerdos de Sídney (Australia), un evento que significó un antes y un después en sus carreras.
