Londres, 11 jun (EFE).- El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantuvo este jueves una conversación con el primer ministro británico, Keir Starmer, con el que coincidió en que el pacto acordado sobre el estatus de Gibraltar tras el Brexit «desbloquea» la oportunidad de avanzar en las relaciones bilaterales entre ambos países.
Los mandatarios hablaron esta tarde «tras el histórico acuerdo de hoy para asegurar el futuro de Gibraltar», indicó un portavoz de Downing Street (residencia oficial y oficina del primer ministro británico) en un comunicado.
La nota destaca que, durante la conversación, Sánchez felicitó a Starmer por su «liderazgo» en el desarrollo de las negociaciones sobre Gibraltar y agregó que su Ejecutivo laborista «había tenido éxito donde otros habían fracasado», en referencia velada a los intentos fallidos de cerrar el acuerdo bajo los anteriores Gobiernos conservadores.
Por ello, ambos líderes también coincidieron en que este avance «desbloquea una enorme oportunidad para avanzar en la relación bilateral entre el Reino Unido y España, en nombre de los pueblos británico y español», añadió Downing Street.
En este sentido, la nota concluye en que tanto Sánchez como Starmer expresaron su intención de «reunirse en persona pronto».
El consenso alcanzado este jueves en Bruselas entre España, el Reino Unido y la Unión Europea sobre el futuro estatus del Peñón era el principal flanco que quedaba sin resolver en las relaciones con el bloque comunitario tras haber quedado excluido en el acuerdo comercial y de cooperación del Brexit hace más de cinco años.
El acuerdo «eliminará la totalidad de las barreras físicas, los chequeos y los controles sobre las personas y mercancías que circulen entre España y Gibraltar, preservando al mismo tiempo el espacio Schengen, el mercado único de la UE y la unión aduanera», señalaron las partes en un comunicado conjunto.
En paralelo a la llamada con Sánchez, el líder británico también mantuvo una conversación con el ministro principal de Gibraltar, Fabián Picardo, al que agradeció «sus años de arduo trabajo, compromiso y liderazgo para alcanzar un acuerdo, y agregó que era fantástico ver que había sido profusamente acogido por todas las partes», recoge Downing Street.
Tanto Starmer como Picardo concordaron que este pacto «abriría un futuro seguro para los ciudadanos y las empresas de Gibraltar, permitiéndoles planificar a largo plazo y, al mismo tiempo, proteger la soberanía británica».