Madrid, 6 oct (EFE).- La ministra de Sanidad, Mónica García, ha pedido a la Junta de Andalucía todos los informes «elaborados o en elaboración» y los indicadores de los últimos cinco años del programa de cribado de cáncer de mama que permitan evaluar la magnitud e impacto en las mujeres del problema detectado en la sanidad andaluza.
En una carta remitida a la consejera de Sanidad andaluza, Rocío Hernández, Mónica García le ofrece la colaboración y apoyo técnico del Ministerio que «sea preciso» para resolver el fallo en la comunicación de los resultados de mamografías a miles de mujeres «lo antes posible y mejorar el programa de cribado de cáncer de mama» y también para evaluar la situación de otros como el de cérvix y el de colon.
«La magnitud del problema actual exige la máxima transparencia y coordinación entre las administraciones para poder dar respuesta a las necesidades de la población y garantizar que se ponen en marcha las medidas necesarias para disminuir los posibles efectos que esto haya tenido sobre las mujeres afectadas, a la vez que evitar que esto vuelva a ocurrir nuevamente», subraya.
Por ello, solicita a Hernández que faciliten al Ministerio «todos los informes elaborados o en elaboración que permitan tener constancia de la magnitud del problema y evaluar el impacto sobre la población, así como las medidas que se hayan puesto en marcha o se vayan a implementar para abordar la situación».
También reclama información de varios indicadores para poder evaluar el desarrollo del programa correspondientes a los últimos cinco años con el fin de «disponer de una perspectiva histórica» que permita analizar su evolución.
En concreto, pide los datos de indicadores básicos como la cobertura de invitación o la de examen en el año índice y en la ronda de cribado; el porcentaje de participación; resultados en prueba de cribado; tasa de aceptación de valoración adicional, de aceptación de la biopsia y de detección o la de incidencia y de mortalidad, entre otros.
Y de otros complementarios, como las tasas de retención, aceptación de la reevaluación temprana, de detección en reevaluaciones tempranas o de aceptación del primer tratamiento, además de los indicadores de complicaciones graves por biopsia; porcentaje de falsos positivos, sensibilidad; tasa de cáncer de intervalo o porcentaje de mujeres con biopsia realizada en los plazos recomendados desde su derivación.
«Los programas de cribado son una prioridad del Sistema Nacional de Salud y no vamos a tolerar fallos estructurales que pongan en riesgo la salud de las mujeres», ha resaltado García en sus redes sociales.
Sobre ello también se ha pronunciado la Asociación Española contra el Cáncer (AECC), que en un comunicado exige a la Junta que resuelva de manera «inmediata» la situación de las mujeres afectadas para acabar con su incertidumbre o, de confirmarse el diagnóstico de cáncer, iniciar cuanto antes el tratamiento.
La asociación ofrece a las afectadas su teléfono gratuito 24 horas (900 100 036) para ayudarlas a recibir información de la Junta, así como todos sus servicios de atención integral, una línea que también pone al servicio del gobierno andaluz para contactar con ellas.
Asimismo, la AECC denuncia que España carece de un sistema de información integrado de conocimiento en cáncer «con datos homogéneos, públicos, actualizados, accesibles y comparables que permita conocer la realidad del cáncer en general y la de los programas de cribado en particular».
Una carencia que «impide cuidar y proteger» a las personas con cáncer, por lo que pide que todas las entidades sociales y científicas y administraciones públicas nacionales, autonómicas y locales trabajen de manera conjunta en este sistema.
Falta además un protocolo de actuación común para los programas de cribado poblacional, lo que profundiza en las inequidades que provoca el cáncer en España, censura.