Sanidad recomienda utilizar paracetamol para el dolor y la fiebre durante el embarazo

Una mujer embarazada se realiza un ultrasonido . EFE/ Francisco Guasco

Madrid, 23 sep (EFE).- La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ha asegurado este martes que el paracetamol puede utilizarse para reducir el dolor y la fiebre durante el embarazo «cuando exista indicación clínica», ya que los datos disponibles no han encontrado ninguna relación causal con el autismo y otros trastornos del neurodesarrollo.

Esta notificación de la Aemps, dependiente del Ministerio de Sanidad, llega después de que la Agencia Europea y diversas sociedades científicas se hayan pronunciado en los mismos términos y hayan salido al paso de las declaraciones del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, quien pidiera este lunes limitar el uso del paracetamol durante el periodo de embarazo por ser un posible causante de autismo.

La Agencia Española ha explicado en un comunicado de que «no existe evidencia que relacione causalmente el uso de paracetamol durante el embarazo con el autismo en niños, por lo que las embarazadas podrían seguir utilizando este medicamento cuando sea necesario, siguiendo siempre la recomendación de utilizar la dosis más baja posible que reduzca el dolor o la fiebre y utilizarla durante el menor tiempo posible».

«La fiebre no tratada y el dolor intenso también conllevan riesgos», añade la Aemps, que apela a la prudencia y explica también que si estos síntomas no disminuyen o si se necesita tomar el medicamento con más frecuencia, hay que consultar a un profesional sanitario.

En el comunicado, este organismo recuerda el estudio realizado en 2019 por el Comité para la Evaluación de Riesgos en Farmacovigilancia (PRAC, por sus siglas en inglés) de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), que concluyó que «los estudios epidemiológicos sobre el neurodesarrollo en niños expuestos a paracetamol en el útero muestran resultados no concluyentes».

Además, insiste en que las autoridades sanitarias supervisan de forma continuada la seguridad de los medicamentos que contienen paracetamol, y en caso de que se modificase el «balance beneficio-riesgo o las condiciones de uso», se comunicaría a través de los canales habituales.

Evidencia científica y salud pública

Esta martes, también han reaccionado a las declaraciones del presidente estadounidense otras sociedades científicas y organizaciones, entre ellas Autismo España, que ha rechazado «rotundamente» estas afirmaciones, porque «van en contra de la evidencia científica y suponen un riesgo para la salud pública».

«Alertamos a las instituciones nacionales e internacionales del riesgo que supone dar un altavoz a discursos populistas y ya superados por la evidencia científica existente, que vulneran los derechos y la dignidad de las personas con autismo» explica esta organización en un comunicado.

La Sociedad Española de Neurología Pediátrica (Senep) ha explicado que «la sospecha lanzada por la Administración norteamericana surge de la publicación de algunos estudios», pero que, «si bien puede existir una asociación de frecuencia de ambos -paracetamol y autismo-, actualmente, según la literatura científica disponible, no existe asociación de causa-efecto» ni «resultados suficientemente robustos».

La Sociedad Española de Psiquiatría y Salud Mental (SEPM) también ha expresado «su profunda preocupación y desacuerdo» con las declaraciones de Trump, que califican de «irresponsables» y ponen en riesgo la salud pública.

Y coincide con la Aemps en el «uso adecuado» del paracetamol para el manejo de la fiebre y el dolor, «ya que la ausencia de tratamiento puede acarrear complicaciones graves tanto para la madre como para el feto».

Las sociedades catalanas de Farmacia Clínica; Farmacología; Obstetricia y Ginecología; Pediatría; y Psiquiatría y Salud Mental han recordado que el estudio epidemiológico más reciente, hecho en Suecia con más de dos millones de niños y con método de comparación entre hermanos, no ha encontrado ninguna asociación entre la exposición prenatal al paracetamol y TEA, TDAH ni discapacidad intelectual.