Santander ha cambiado el nombre de más de la mitad de calles con denominación franquista

El Ayuntamiento de Santander ya ha cambiado más de la mitad de los nombres de calles previstos, tras requerirlo la Fiscalía de Derechos Humanos y Memoria Democrática. EFE/Pilar Palazuelos

Santander, 3 ago (EFE).- El Ayuntamiento de Santander ya ha cambiado el nombre de más de la mitad de las calles con denominaciones franquistas de la ciudad afectadas por la Ley de Memoria Democrática, para cumplir así con el requerimiento que le hizo la Fiscalía para efectuar esa modificación.

A finales de marzo, la Fiscalía de Derechos Humanos y Memoria Democrática de Cantabria dio un plazo de un mes al Ayuntamiento de Santander para proceder al cambio de nombre de calles con denominaciones franquistas, para cumplir los acuerdos adoptados en los plenos municipales de agosto de 2015 y mayo de 2016 sobre la retirada de esos nombres del callejero y otros elementos conmemorativos contrarios a la Ley de Memoria Democrática.

Y a consecuencia de ello, el pasado 25 de abril el Ayuntamiento aprobó en pleno, con los votos a favor del PP, la abstención del PSOE, PRC y el Grupo Mixto-IU, y el rechazo de Vox, los cambios de nombres de las calles.

Los cambios en el callejero de Santander que el Consistorio tenía que acometer son: el Alto de los Leones por Benito Madariaga; Belchite por José Luis Casado Soto; Brunete por Carmen y Joaquín González Echegaray; Camilo Alonso Vega por José Hierro; Capitán Cortés por Miguel Ángel García Guinea; Carlos Haya por Antonio de Tova y Arredondo; García Morato por Juan Antonio Gutiérrez de la Concha; y General Díez de Villegas por José de Bustamante y Guerra.

También están los cambios de nombre de General Dávila por Paseo de Altamira; Alféreces Provisionales por Fray Silvestres Vélez de Escalante; General Moscardó por Bernardo de Miera y Pacheco; Montejurra por Valentín Lavín Casalís; Ruiz de Alda por Juan de Santander; Sargentos Provisionales por Leonor Plantagenet; y Zancajo Osorio por Leonor de la Vega.

El proceso avanza y ya se han hecho la mitad de los cambios .Hasta el momento son 9 las calles que han cambiado de nombre.

«Es un proceso progresivo y escalonado, pero que no se detiene. Se va desplegando con la implicación de los departamentos de talleres, vialidad y estadísticas, y en coordinación con los vecinos», destaca a EFE el Ayuntamiento.

Así, ya están con su nueva denominación las calles José Bustamante y Guerra (antigua General Villegas); Bernardo Miera y Pacheco (General Moscardó); Juan Antonio Gutiérrez de la Concha (García Morato); y Antonio de Tova y Arredondo (Carlos Haya).

También las calles Valentín Lavín Casalís (Montejurra), Miguel Ángel García Guinea (Capitán Cortés), José Luis Casado Soto (Belchite); Benito Madariaga (Alto de los Leones); y Brunete por Carmen y Joaquín González Echegaray.

Denuncias en Fiscalía

Este asunto del cambio de nombre de calles con denominaciones franquistas viene de hace ya tiempo con denuncias en la Fiscalía.

En junio de 2024, cuarenta ciudadanos presentaron una denuncia ante la Fiscalía Superior de Cantabria por un presunto delito de prevaricación contra el Ayuntamiento de Santander.

Alegaban que el Consistorio no accedía a retirar del callejero municipal los nombres de Paseo del General Dávila y la calle Alonso Vega.

La denuncia se archivó un mes después porque, según la Fiscalía, los hechos denunciados no se correspondían con el tipo penal de la prevaricación administrativa.

Unos meses después, en diciembre del año pasado, varios ciudadanos a título particular presentaron ante la Fiscalía de Memoria Democrática de Cantabria una petición para que se ejecutara inmediatamente el acuerdo del pleno del Ayuntamiento de Santander de agosto de 2015, en ese sentido.

Y ya en febrero de este 2025 representantes de varios colectivos presentaron ante la Fiscalía una petición solicitando la intervención de la Fiscalía de Derechos Humanos y Memoria Democrática de Cantabria, para obligar al Ayuntamiento de Santander a que retirase toda denominación con menciones a la exaltación de la sublevación militar, la Guerra Civil o la dictadura.

Al contestar a la Fiscalía a su requerimiento, el Ayuntamiento señaló que ya se habían hecho cambios en el callejero, hasta 16, y que se habían retirado monumentos, de acuerdo con lo previsto en la Ley de Memoria Democrática y también antes de su aprobación, según apuntó el Consistorio.