La Paz, 16 may (EFE).- Los seguidores del expresidente de Bolivia Evo Morales se enfrentaron este viernes con policías antidisturbios al intentar ingresar hasta la sede del órgano electoral en La Paz, a donde viajaron desde el centro del país con la intención de inscribir la candidatura del político para los comicios generales de agosto.

Los manifestantes, entre los que hay campesinos, cocaleros e indígenas afines a Morales (2006-2019), llegaron a La Paz en la víspera desde la región central de Cochabamba y en esta jornada marcharon desde la ciudad vecina de El Alto hasta el barrio residencial de Sopocachi, donde está la sede del Tribunal Supremo Electoral (TSE).

La Policía montó un operativo en los alrededores de la plaza y puso cordones de seguridad con agentes antidisturbios en las calles aledañas al TSE para evitar el paso de los movilizados, quienes no se resignaron e insistían en avanzar.
Finalmente los manifestantes rebasaron a los policías con violencia y se abrieron paso a empujones y lanzando agua y petardos, a lo que los agentes respondieron con gas pimienta, gas lacrimógeno y balines de goma, constató EFE.
La reacción policial hizo retroceder a las personas movilizadas, que trataban de reagruparse unas calles más allá.
El comandante nacional de la Policía, general Augusto Russo, cuestionó que la marcha no fue “pacífica”, como prometieron los dirigentes y parlamentarios afines a Morales que la lideraron.
“Están usando petardos, están usando objetos contundentes (…) que dañan la integridad de los policías y eso no lo vamos a permitir”, sostuvo Russo, y también lamentó que hubo agresiones contra los periodistas que estaban en el lugar.
El oficial explicó que el operativo ejecutado en la plaza Abaroa para custodiar la sede del TSE se coordinó con ese organismo para que se desarrolle en “orden” el proceso de inscripción de candidaturas para las elecciones del próximo 17 de agosto.
Más temprano, el secretario de Cámara, Fernando Arteaga, dijo a los medios que solamente están autorizados a pasar los cordones de seguridad los delegados de cada organización política para hacer la inscripción correspondiente, y no así los seguidores de los partidos, como ocurrió en otros eventos electorales.
Evo Morales está distanciado del Gobierno de Luis Arce desde finales de 2021 por diferencias en la administración del Estado y por el control del gubernamental Movimiento al Socialismo (MAS,) al que lideró durante casi 30 años hasta que en 2024 la Justicia y el ente electoral reconocieron como su nuevo presidente a un líder campesino afín al Ejecutivo.
El expresidente renunció al MAS e impulsó la creación del bloque político Evo Pueblo, aunque no podrá participar en estas elecciones por falta de tiempo para obtener su personalidad jurídica.
El Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) reiteró el miércoles que la reelección presidencial es por una sola vez de forma continua y sin posibilidad de un tercer mandato, por lo que Morales no puede ser candidato nuevamente al haber gobernado Bolivia en tres ocasiones (2006-2009, 2010-2014 y 2015-2019).
No obstante, el exmandatario y sus seguidores insisten en que está habilitado y consideran que el también líder cocalero es víctima de una “guerra judicial, política y electoral”.
Morales y sus seguidores anunciaron varias veces su participación en la marcha, si bien no se le ha visto por el momento en La Paz.
El político ha permanecido desde octubre en el Trópico de Cochabamba, su bastión sindical y político, para evitar ser detenido dentro de una investigación en su contra por el presunto delito de trata agravada de personas.