Pamplona, 12 ago (EFE).- El delantero de Osasuna Raúl García de Haro encara la recta final de una pretemporada en la que ha sido el nombre destacado antes de iniciar su tercera temporada en Pamplona con buenas sensaciones.
La delantera, esa posición dominada por Ante Budimir en Osasuna durante los últimos cinco años, con 66 goles en Liga que le colocan como el máximo goleador histórico del club en Primera. Además, tanto Jagoba Arrasate como Vicente Moreno optaron por jugar con un solo punta, algo que podría cambiar este año, dejando abierta la puerta a otro actor.
El técnico italiano Alessio Lisci llegó con ideas renovadas de juego, al igual que con un cambio de esquema que despierta sentimientos encontrados entre sus aficionados. Defensa de tres centrales y dos carrileros para surtir de balones a los dos delanteros que, presumiblemente ocuparán este última demarcación.
El gran beneficiado de este cambio sería Raúl García de Haro, un jugador que no ha contado con todos los minutos que le gustaría hasta este verano. El de Olesa de Montserrat ha anotado tres tantos y ha repartido una asistencia. El jugador, se ve “compatible” con el croata, mientras afronta la última semana de entrenamientos.
Tras los dos goles ante el Mirandés, Raúl cerró el verano con asistencia y gol en Alemania ante el Friburgo, algo que seguro dejó satisfecho a un Lisci que ve cualidades de sobra en el ariete.
Restan siete días para armar un once competitivo que plante cara en el Bernabéu. La opción con dos referencias ofensivas sería la gran novedad, sentando un precedente que hasta hace no mucho tiempo pocos veían factible.
Con un perfil distinto al de Budimir, el exjugador del Betis tomaría un papel de fútbol control, con su buen juego de espaldas para generar o bien para atraer a la defensa rival, todo ello sin olvidar su faceta como goleador, la cual quedó destapada hace tres años con el Mirandés, equipo con el que anotó 19 goles en Segunda División antes de dar el salto a Primera División de la mano de Osasuna.
