Madrid, 29 jun (EFE).- ¿Quieres conectar con la naturaleza, respirar aire puro y descubrir el patrimonio natural y cultural de España? En un inicio de verano marcado por el calor sofocante en España, los senderos azules ofrecen más de 1.000 kilómetros de rutas de gran valor ecológico, calidad, seguridad y potencial educativo para disfrutar del ocio al aire libre de forma sostenible.
El programa Sendero Azul, impulsado por la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC), ha alcanzado en 2025 un nuevo récord con 154 itinerarios reconocidos. Estas rutas, que superan los 1.000 kilómetros de recorrido, se distribuyen por 127 municipios, 21 provincias y 11 comunidades autónomas.
Se trata de una «iniciativa que reconoce el esfuerzo de administraciones locales y entidades por recuperar antiguos caminos, rutas costeras o senderos de interior, transformándolos en espacios accesibles para caminar, practicar deporte o simplemente disfrutar de la naturaleza», explica a EFE Pepe Palacios, presidente de ADEAC.
El distintivo pone en valor la «integración entre conservación ambiental, accesibilidad y uso responsable del medio natural», señala Palacios, quien subraya, que también funcionan como espacios de protección de la biodiversidad y resalta la importancia de «preservar el patrimonio natural para generaciones futuras».
¿Dónde se encuentran?
Galicia lidera el ranking nacional con 54 Senderos repartidos en 28 municipios, que suman más de 380 kilómetros señalizados. Destinos como Sanxenxo, Oleiros, Muxía, Carballo, Foz, Sanxenso o Bueu ofrecen múltiples rutas ideales para descubrir sus paisajes costeros y naturales.
Le siguen la Comunidad Valenciana y la Región de Murcia, ambas con 26 senderos reconocidos.
En la Comunidad Valenciana, los 95 kilómetros señalizados se reparten entre las tres provincias: Alicante, con rutas en Benidorm, Benissa o Calp; Valencia, con caminos en municipios como Cullera, Gandía o Sagunto; y Castellón, donde destacan las dunas de Peñíscola o el paseo del Faro en Oropesa del Mar.
La Región de Murcia ha sido la comunidad con más incorporaciones este año, sumando 11 nuevos senderos en 8 municipios. Uno de los más emblemáticos es el Sendero Azul del Puerto de Cartagena, que ha sido distinguido como el «kilómetro 1.000» por su reciente ampliación y excelente conservación.
Andalucía cuenta con 18 rutas por Almería, Cádiz, Huelva y Málaga, con un total de algo más de 85 kilómetros. En Cádiz sobresalen los senderos de Barbate, Rota, Conil y Chiclana; en Almería, el sendero de San Nicolás en Adra; en Huelva, los itinerarios se reparten entre Islantilla, Isla Cristina, Cartaya, Lepe y Punta Umbría; mientras que en Málaga hay rutas en Manilva, Nerja y Mijas.
Extremadura aporta cinco senderos de interior, con un total de 155 kilómetros, ideales para quienes buscan disfrutar de la naturaleza en dehesa. En Badajoz destacan la Vía Verde Mina La Jayona y la Vía de las Vegas del Guadiana, mientras que en Cáceres sobresalen rutas como el Desfiladero de Rueca, Monfragüe y el Camino de la Plata.
Cataluña cuenta con siete senderos repartidos entre las provincias de Girona y Tarragona, con un total de 50 kilómetros. Entre los más conocidos se encuentran el Camí de Ronda de S’Agaró y el Sendero Litoral del Jonquet.
En el Cantábrico, Asturias destaca con ocho senderos que suman 50 kilómetros, distribuidos en localidades como Cudillero, Navia, Valdés, Salas, Onís o Castrillón. En Cantabria se han señalizado tres rutas que recorren unos 10 kilómetros en los municipios de Arnuero y Noja.
En el centro peninsular, la Comunidad de Madrid suma su aportación con el Camino Viejo de Las Matas, ubicado en Las Rozas. Este sendero forma parte del Parque Regional del Curso Medio del río Guadarrama y destaca por su valor histórico, ambiental, cultural y turístico.
En los archipiélagos, Canarias aporta dos senderos ubicados en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, en los municipios de Tazacorte (Sendero del Time) y San Cristóbal de La Laguna. Por su parte, Baleares suma cuatro senderos distribuidos entre Muro, Palma, Santa Margalida y Sant Llorenç des Cardassar.
Senderos para todos
Uno de los valores añadidos de los Senderos Azules es que muchos están adaptados para todos los públicos, con tramos accesibles para personas con movilidad reducida, señalización clara y áreas de descanso.
Además, estos senderos no solo ofrecen naturaleza: muchos permiten descubrir faros, castillos, antiguos molinos, salinas, yacimientos arqueológicos o miradores espectaculares. A lo largo del recorrido, paneles informativos explican además la historia, la flora y la fauna del lugar.
Planificar rutas
Antes de emprender el camino, se recomienda consultar la información disponible en los portales turísticos de cada comunidad autónoma o en la web oficial de Senderos Azules. Allí podrás encontrar mapas, niveles de dificultad, distancia, accesibilidad y recomendaciones prácticas. EFE
esl/crf
(foto)