Madrid, 9 feb (EFE).- Los sindicatos médicos han convocado mañana concentraciones en todas las comunidades como paso previo a la “gran manifestación” que celebrarán el próximo jueves a las puertas del Ministerio de Sanidad contra el nuevo estatuto marco y exigir una regulación propia de los facultativos.
Centros de salud, hospitales y delegaciones y subdelegaciones de toda España se convertirán este lunes en el centro de las protestas programadas por la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), Sindicato Médico Andaluz (SMA), Asociación de Médicos y Titulados Superiores de Madrid (AMYST), Sindicato Médico de Euskadi (SME), Sindicato de Empleados Médicos de Canarias (SEMCA) y Sindicato Omega (Sindicato de Facultativos de Galicia).
“Estamos decididas a coordinar las acciones necesarias para alcanzar una regulación específica para el médico y el facultativo enfocada a que el Sistema Nacional de Salud (SNS) mantenga su elevado nivel de calidad asistencial y un grado de satisfacción relevante por parte de la ciudadanía”, enfatizan estas organizaciones en su convocatoria.
Con ella, calentarán motores antes de la “gran manifestación” que celebrarán el jueves con el aval de la Organización Médico Colegial (OMC) y varias comunidades populares que han mostrado públicamente su apoyo.
Precisamente ese día está programada la nueva reunión en la que el departamento que dirige Mónica García y los sindicatos retomarán las negociaciones del estatuto marco, cuyo borrador es el que ha encendido a los médicos por varias cuestiones.
Entre otros asuntos, se quejan de que el borrador mantiene una jornada obligatoria de 48 horas y plantea una especial de hasta 150 horas más; no computa las horas de descanso diario semanal posguardia y obliga a su recuperación.
Sin embargo, desde el Ministerio de Sanidad sostienen que el texto indica que la jornada obligatoria de 48 horas es el límite máximo en el cómputo cuatrimestral, pero no obligatorio.
“A día de hoy el límite de la duración de la jornada son 24 horas. La propuesta es que el tope sea de 17 horas, eso deja libertad y flexibilidad para organizar turnos y guardias como se quiera (jornadas de 12, 15, 17 horas…) Pero eso cae en el tejado de la gestión y de la negociación”, precisó el secretario de Estado, Javier Padilla, en sus redes sociales.
Respecto a la controversia con las 150 horas, sería el límite máximo, no una obligación, y aplicaría a aquellos que quieran hacer horario extra como peonadas, según la versión del Ministerio, que afirma también que las horas de descanso diario semanal posteriores, algo que no ocurre ahora.
Su retribución se negocia en las comunidades autónomas, pero en todo caso, según Sanidad, el nuevo estatuto plantea “por primera vez” poner “un suelo a este pago para que no se tire para abajo” este precio.
Los convocantes también censuran el “rígido” sistema de incompatibilidades planteado en el borrador, que lamentan que afecta casi únicamente a los médicos al exigir dedicación exclusiva en la pública a jefes de sección y otros cargos de responsabilidad del Sistema Nacional de Salud.
Una exclusividad que vendría acompañada de su retribución correspondiente, según aclaró la ministra, que defendió la medida con este argumento: “Nadie se imagina que alguien pueda trabajar en Coca-Cola y en Pepsi a la vez. Sabemos que genera conflictos de interés y malas prácticas que perjudican a nuestro Sistema Nacional de Salud”.
Pero lo que más solivianta a los médicos es la negativa a reconocer la especificidad de su profesión con un estatuto propio, que sería “la única solución para que el sistema de salud retenga y fidelice” a estos profesionales.
Algo que Sanidad rechaza porque, en palabras de su responsable, “el estatuto marco pertenece a todos los profesionales del Sistema Nacional de Salud, a todos y cada uno de ellos”.