Socios comerciales y empresas ofrecen inversiones millonarias a EEUU para evitar aranceles

Imagen de archivo del edificio de la compañía estadounidense Nvidia en Taipéi (Taiwán). EFE/ Javier Castro Bugarín

Madrid, 9 ago (EFE).- Los socios comerciales que han logrado acuerdos con la Administración Trump y distintas empresas, como Apple o Nvidia, han prometido miles de millones de dólares en inversiones en Estados Unidos para lograr pactos menos lesivos y sortear así unos aranceles que están redefiniendo el orden mundial.

Las inversiones comprometidas por parte de la Unión Europea (UE), Corea del Sur o Japón, socios comerciales de Estados Unidos, superan ya los 2 billones de dólares, aunque el horizonte temporal es todavía difuso en cuanto a los plazos de los que disponen cada uno de esos socios.

Ese gasto para contentar a Trump también ha llegado a las empresas, tanto estadounidenses como extranjeras, que buscan librarse de estos gravámenes fabricando en el país norteamericano.

Hace apenas diez días, EE. UU. y la UE firmaron un acuerdo que, más allá de imponer un arancel del 15 % a las exportaciones europeas, también prevé adquirir gas natural licuado y petróleo estadounidenses por 750.000 millones de euros para sustituir el petróleo ruso.

Europa también comprará chips por 40.000 millones de euros (unos 46.600 millones de dólares) para desarrollar las gigafactorías de inteligencia artificial (IA) en la UE, además de invertir «al menos 600.000 millones de dólares en diversos sectores de los Estados Unidos de aquí a 2029».

Corea del Sur ha accedido a acometer inversiones por valor de 350.000 millones de dólares en Estados Unidos y comprar gas natural licuado (GNL) por valor de 100.000 millones de dólares, con tal de rebajar del 25 al 15 % los aranceles a sus exportaciones hacia el mercado estadounidense.

Japón, que también pagará el 15 % de aranceles para todas sus exportaciones al país norteamericano, creará un fondo de 550.000 millones de dólares para invertir en suelo estadounidense.

 

Fabricar en EE. UU., una puerta para evitar los aranceles

Fabricantes de chips, automovilísticas, empresas tecnológicas o farmacéuticas, compañías que pertenecen a sectores amenazados por los aranceles, han negociado con la Administración Trump para lograr exenciones que siempre han tenido una misma respuesta: invertir en EE. UU.

Nvidia fue uno de los primeros en prometer una inversión sideral: ya en abril, anunció que fabricaría supercomputadoras de IA en EE. UU. por primera vez y produciría infraestructura en ese ámbito por valor de 500.000 millones de dólares durante los próximos cuatro años.

Antes, la taiwanesa y líder en la producción de chips TSMC anunció una inversión de 100.000 millones de dólares en EE. UU. para construir tres nuevas fábricas, dos instalaciones de empaquetado de chips avanzados y un centro de desarrollo.

También se apuntó a esa tendencia Apple, que primero prometió invertir 500.000 millones de dólares en cuatro años para ampliar su producción en el país, una cifra a la que esta semana sumó otros 100.000 millones de dólares.

Todas estas inversiones tienen un denominador común: evitar los gravámenes de Trump. Pero la cascada de inversiones también llega a otros sectores como el automóvil.

General Motors explicó en junio que trasladará de México a EE. UU. la fabricación de dos modelos y que durante los próximos años invertirá 4.000 millones de dólares en tres plantas estadounidenses para incrementar su producción.

No ha sido la única, pues también se han movido otros fabricantes extranjeros como Toyota, que, en boca de su director financiero, Takanori Azuma, dijo esta semana que tienen planes a medio y largo plazo para «impulsar la producción» en Estados Unidos, aunque todavía no han concretado sus inversiones.

Por ahora, su filial Toyota Norteamérica ya ha anunciado una inversión de 88 millones de dólares en su planta de Virginia para producir la próxima generación transmisores híbridos.

En el ámbito farmacéutico, Johnson&Johnson destinará 55.000 millones de dólares en cuatro años y la suiza Roche invertirá 50.000 millones de dólares en cinco ejercicios, por los 20.000 millones de la francesa Sanofi o los 50.000 de AstraZeneca en ese mismo periodo.

Más allá de estos anuncios, en los últimos meses Trump también ha cerrado varias inversiones para «reindustrializar» Estados Unidos, sobre todo tras una gira por Arabia Saudí, Catar y Emiratos Árabes Unidos (EAU) en la que logró acuerdos por «entre 3.500 y 4.000 millones de dólares» en EE. UU. durante los próximos diez años.

El republicano aseguró que EAU invertirá 1.400 millones en semiconductores, manufactura e inteligencia artificial durante los próximos diez años, mientras que Arabia Saudí destinará 142.000 millones de dólares a empresas de defensa estadounidenses.