Subdirector de Transición Ecológica: La ley no exige que la presa de Forata tenga sirenas

Imagen de la presa de Forata, en una fotografía de archivo. EFE/Manuel Bruque

Madrid, 12 jun (EFE).- El subdirector general de Dominio Público Hidráulico e Infraestructuras del Ministerio para la Transición Ecológica, Francisco José Hijós, ha asegurado en relación con la dana de Valencia que en la presa de Forata «no hay sirenas, pero tampoco es obligatorio que las haya», tras destacar la excepcionalidad del evento, algo que «nunca antes la ingeniería española» había experimentado.

 «Según la normativa vigente, los sistemas de aviso a la población no tienen por qué ser exclusivamente acústicos. Pueden ser también luminosos u otros sistemas alternativos», ha destacado este jueves Hijós durante su comparecencia en la Comisión de investigación de la dana en el Senado para dilucidar las causas del trágico suceso y posibles actuaciones de recuperación.

Ha sido «el mayor evento natural que nunca antes la ingeniería española había experimentado» en cuanto a impacto por la enorme cantidad de lluvias y caudales, ha explicado.

Es importante aclarar que las sirenas contempladas en los planes de emergencia son sistemas de aviso selectivo diseñados específicamente para alertar a la población ubicada dentro de la zona que se vería afectada durante la primera media hora tras una eventual rotura de la presa, ha añadido.

Las sirenas tienen un carácter complementario y selectivo y se circunscriben a la porción del territorio situada dentro de esa primera media hora, ha insistido Hijós.

Sobre la presa de Forata, que en el evento de la dana estaba «en unas circunstancias especialmente buenas», ha explicado que al igual que otras muchas de estas infraestructuras tiene establecido una serie de resguardos estacionales.

En el momento de la dana se cumplían «muy holgadamente» los requisitos en términos de poder absorber volúmenes. Se demostró además que el funcionamiento del aliviadero fue suficiente para provocar una laminación que resultó «muy eficaz», según el experto.

Los aliviaderos estaban dotados de unas compuertas que al inicio del evento estaban absolutamente levantadas, con lo que fue «prácticamente laminado» de una manera pasiva, ha añadido.

El subdirector del Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) ha insistido en que el evento rebasó «cualquier previsión razonable» y se ha manifestado partidario del máximo de medidas que permitan evitar sucesos de este tipo por parte de las administraciones; todas «son bienvenidas», no una única ni un solo paquete.

Ha aprovechado su intervención para subrayar la importancia de la colaboración entre todos los actores (administraciones, organismos …) para hacer frente a catástrofes de este tipo.

«Insisto en esa idea de la concertación y actuación conjunta entre todos, porque una situación como esta solo puede superarse si trabajamos unidos».

Ha admitido que en este país las obras hidráulicas «tienen gran dificultad» para ser impulsadas, «son extraordinariamente complicadas» de ejecutar «por sus tiempos de maduración, de tramitación».

«Prácticamente no hay ninguna que goce de suficiente aceptación social y no tenga algún tipo de oposición, bien sea local, institucional», ha dicho.

 En cuanto a inversión en obras hidráulicas en el país, ha dicho que «ha decaído» aunque es «una cuestión de orden superior»; se está intentando «revertir en estos últimos años, se han activado distintos mecanismos y programas de inversión» aunque las decisiones dependen de las prioridades presupuestarias. EFE

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