Superhéroes y villanos de todos los universos se reúnen en la Comic Con de Nueva York

Una persona posa con su cosplay durante la Comic Con este jueves, en una calle de Nueva York (Estados Unidos). EFE/ Ángel Colmenares

Nueva York, 9 oct (EFE).- Superhéroes y villanos de todos los universos se reúnen este jueves en la Comic Con de Nueva York para celebrar la cultura pop, conocer a los actores y dibujantes detrás de sus personajes favoritos y comprar artículos exclusivos.

Esta es la décima convención para una de las asistentes, Lindle Key, que hoy vino pintada de azul y disfrazada de Jester Lavorre, un personaje de ‘Critical Role’, un juego de rol que se convirtió en una serie.

Pero su mejor traje este año -asegura- será el de Rio Vidal, de la serie ‘Agatha All Along’ de Marvel, que se pondrá el sábado para participar en un concurso de ‘cosplay’ de la Comic Con.

«(Lo más especial de esta convención) es estar rodeado de tantas personas que también aman el mundo ‘nerd’ y contar historias, es simplemente un lugar maravilloso para estar y conectarse con amigos», explica a EFE Key, quien añade que en su década de asistir a esta convención ha hecho varios amigos.

Por los pasillos de la enorme convención -que durará hasta el domingo- es normal ver a los asistentes pedirles fotos a los que van disfrazados, así como a gente jugando a pasatiempos de todo tipo, desde Tetris o ajedrez, y, cómo no, juegos de rol.

Una afición muy cara 

Fotografía que muestra a un perro disfrazado de Vegeta durante la Comic Con este jueves, en Nueva York (Estados Unidos). EFE/ Ángel Colmenares

Key cuenta que esta afición es muy cara y que durante la pandemia aprendió a coser para abaratar así el coste de los disfraces. Pese a no decir el precio exacto de su disfraz, sí que indicó que tardó casi 11 meses en confeccionar el vestuario de Rio Vidal.

Por su parte, Tom Jarvis tardó solo tres meses en confeccionar su traje de Flash del juego ‘Injustice’ de 2013, ya que usó una impresora de 3D para hacer la máscara y la coraza.

Pero el hecho de tener una impresora 3D en su casa no abarató su asistencia a esta convención, ya que vino especialmente desde Reino Unido a Nueva York para asistir por segundo año consecutivo a la Comic Con.

«Tenemos convenciones en Inglaterra. Pero esto es algo enorme», explica Jarvis, que dice que el evento que más ilusión le hace es uno para conocer al actor Brendan Fraser, reconocido principalmente por sus interpretaciones en películas como ‘George of the Jungle’ o ‘La momia’, entre otros muchos títulos.

Matthew Magalio es de los pocos que se atreve a confesar cuánto le costó asistir al evento: unos 300 dólares, sumando el tren de Connecticut a la Gran Manzana, la entrada para un día y los materiales para su improvisado disfraz.

«Soy un Inquisidor (de Star Wars), que yo creé. Lo inventé porque mueren todo el tiempo. Así que pensé: «Puedo inventar mi propio personaje con lo que tengo», dice el joven de 21 años, que para la ocasión se pintó la cara de rojo y negro.

Magalio cree que al final del día se habrá gastado incluso más dinero, ya que la convención está pensada para que los fans consuman todo tipo de contenido, desde perritos calientes servidos por Deadpool, figuras para todos los gustos, autógrafos y oportunidades de retratos con sus intérpretes preferidos y, cómo no, muchos cómics.

A tan solo unos minutos de la apertura de las puertas de la convención ya se había formado una cola de varias horas delante del ‘stand’ de Comic Mint.

«Cada año publicamos algunas de las mejores exclusivas en la Comic Con de Nueva York. Aquí contamos con algunos de los artistas de cómics más destacados de la industria, especialmente uno de los títulos más populares: ‘Pop Kill’. Will Jack (destacado artista de portadas de cómics) creó este año una variante diferente de portadas a las que ya ha hecho en exclusiva de esta feria», anota a EFE Tony Trophy, también ilustrador.

Los precios de estas ediciones van desde los 20 dólares, a los 175 dólares, para las ediciones más exclusivas.

Un hombre posa disfrazado de Superman durante la Comic Con este jueves, en una calle de Nueva York (Estados Unidos). EFE/ Ángel Colmenares