Swiatek llega a París con los pies en la tierra

La Iga Swiatek, defensora del título y máxima favorita en Roland Garros. EFE/EPA/TERESA SUAREZ

París, 24 may (EFE).- La defensa del título de Roland Garros aparece más incierta que nunca para la polaca Iga Swiatek, en medio de una temporada gris que espera relanzar en el Grand Slam que ha ganado en las tres últimas ocasiones y mantener su hegemonía sobre la tierra batida frente al acecho de la bielorrusa Aryna Sabalenka o la estadounidense Coco Gauff.

Sin trofeos sobre arcilla, la polaca de 23 años, relegada al quinto puesto del ránking, aspira a que París vuelva a ser su talismán y sumar una quinta corona, una manera de relanzar un año en el que ha sucumbido en la segunda ronda en Stuttgart y Roma y las semifinales de Madrid, ante una Gauff que aparece como una de las amenazas.

Acostumbrada a llegar a la capital francesa como incontestable favorita, en ocasiones con rachas interminables de triunfos, Swiatek deberá armarse mentalmente para afrontar el reto de una manera diferente.

El peso del favoritismo recae esta vez en Sabalenka, la número 1 del mundo y la que aparece como la jugadora más dominante, pese a su derrota en cuartos de final de Roma contra la china Qinwen Zheng, pocos días después de haber levantado el trofeo de Madrid.

La bielorrusa de 27 años, que cuenta con tres Grand Slam y cuatro finales, nunca ha superado el penúltimo escalón en Roland Garros, una espina que aspira a sacarse.

El torneo sueña con un duelo que se ha repetido en doce ocasiones, pero nunca bajo el cielo de París, con ocho triunfos para la polaca y uno solo de la bielorrusa sobre tierra batida.

El duelo deseado

El sorteo cruzó sus caminos en semifinales si ambas superan sus compromisos anteriores en un circuito femenino en el que se han avivado las rivalidades.

Si Sabalenka emerge como la principal amenaza para Swiatek, Gauff supone otra de talla, porque la estadounidense, número 2, ha madurado su tenis y a sus 21 años es una rival más sólida que encontró en la final de 2022 o en las semifinales del año pasado.

El correctivo que le propinó en Madrid a principios de mes, 6-1, 6-1, muestra bien el ascenso de la estadounidense, que además de la final en España jugó la de Roma.

Allí perdió contra la italiana Jasmine Paolini, cuarta del mundo, finalista el año pasado en París, otra de las pretendientes que llega con un escalón ascendido para aparecer como candidata a la Copa Suzanne Lenglen.

Tras ellas hay un pelotón de jugadoras que aspiran a dar la sorpresa como la rusa Mirra Andreeva, semifinalista en 2024 con 17 años, o la china Zheng, la ucraniana Elina Sitolina, que a sus 30 años ha mostrado una gran solidez, o la letona Jalena Ostapenko, que recuerda algo a la jugadora que se impuso en 2017.

La española Paula Badosa, décima favorita, también aparece como una de las jugadoras que se agranda en las citas de gala y puede dar un paso adelante, si las lesiones le respetan, en un torneo en el que en 2021 alcanzó los cuartos.

Su primer duelo frente a la japonesa Naomi Osaka, ex número 1 del mundo, ha despertado una gran expectación.

Luis Miguel Pascual