Bangkok, 8 jun (EFE).- El Gobierno de Tailandia confirmó este domingo que ha restringido el horario de varios puestos fronterizos con Camboya en medio del aumento de tensión entre ambos países por una reciente disputa fronteriza que se saldó con un muerto.
«Nos gustaría aclarar que estas no son órdenes de cierre inmediato, más bien es un proceso gradual y apropiado que se ajuste a cada circunstancia y área específica», dijo en una rueda de prensa Nikorndej Balankura, portavoz del Ministerio de Exteriores.
Como ejemplo, el diplomático señaló que el paso en la ciudad de Aranyaprathet, colindante con la urbe camboyana de Poipet, cerrará desde 16:00 hora local (9:00 GMT) hasta las 8:00 (1:00 GMT) del día siguiente e impide la salida a tailandeses que vayan a realizar turismo o quieran visitar los casinos del país vecino.
El representante de Exteriores señaló que actualmente la situación se encuentra «en calma» pero que esta medida permitirá al Ejército «reforzar» la seguridad.
Estos cambios llegan después de que diferentes regimientos del Ejército tailandés asumieran desde el sábado el control de los puntos fronterizos a lo largo de los 817 kilómetros de frontera que comparten ambos países.
El tailandés insistió en que el gobierno de Bangkok busca abordar el problema de manera bilateral, en lugar de acudir a la justicia internacional como pretende Camboya, y urge a Nom Pen a «reducir el nivel de tensión».
Ambos países han reforzado el despliegue de tropas en zonas donde se solapan las reclamaciones territoriales y después de que el pasado 28 de mayo se registrara un intercambio de disparos durante unos 10 minutos en una remota zona no demarcada.
Un incidente que terminó con un soldado camboyano muerto y por el que Bangkok y Nom Pen se acusan el uno al otro de iniciarlo.
Tras esa refriega, grupos nacionalistas han avivado en las redes sociales la histórica rivalidad entre ambas naciones, cuya frontera fue cartografiada por Francia en 1907, cuando Camboya era su colonia.
La tensión territorial generalmente se ha abordado de manera diplomática, en parte gracias a la estrecha relación entre los exdirigentes Thaksin Shinawatra y Hun Sen, cuyos hijos Paetongtarn y Hun Manet gobiernan ahora Tailandia y Camboya, respectivamente.
En 2011, no obstante, los Ejércitos de ambos países mantuvieron duros enfrentamientos que acabaron con la vida de al menos 28 personas por un conflicto sobre la soberanía de un territorio adyacente al templo hindú de Preah Vihear, Patrimonio de la Humanidad y a unos 25 kilómetros de donde se produjo el enfrentamiento de mayo.
Sobre esta zona alrededor del Preah Vihear, en 2013, 17 magistrados de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) dieron la razón a Camboya en su reclamo y ordenaron que los militares tailandeses abandonaran el área.