Madrid, 7 jul (EFE).- El secretario general del PP, Miguel Tellado, ha señalado este lunes que aprecia una «evidente incomodidad creciente» entre los socios parlamentarios del Gobierno de Pedro Sánchez, a la espera de sus explicaciones sobre el caso Koldo del miércoles en el Congreso.

«Tremendamente incómodos», ha reiterado Tellado sobre los socios parlamentarios, durante su primera rueda de prensa en la sede del PP como secretario general del partido, después de que la semana pasada, cuando aún ejercía de portavoz en el Congreso, se entrevistara con varios portavoces de diversos grupos parlamentarios.
Esa incomodidad que percibe le lleva a pensar que «esta legislatura se ha acabado», y espera que después del miércoles, algunos diputados que sostienen al Gobierno puedan replantearse su apoyo porque, «de nada sirve fingir incomodidad y mantener a Sánchez en la Moncloa», ha sostenido el secretario general del PP, quien cree que están pasando de ser socios a «cómplices».
«Tienen que formulárselo a sí mismos y decidir si les compensa esta situación, si creen que su electorado les dio sus votos para mantener a un Gobierno que hoy tiene tantas sombras de corrupción», ha resaltado.
Esta situación se la ha planteado también al socio de gobierno, Sumar, al destacar el «alto coste político» que les conlleva seguir en el Ejecutivo, pese a las «pantomimas» de la vicepresidenta segunda y titular de Trabajo, Yolanda Díaz.
Y se la ha hecho extensiva también a los diputados castellanomanchegos del PSOE, que pese a lo que dice el presidente de la Junta, Emiliano García-Page, votaron la investidura de Sánchez y le «mantienen en el poder».
«Ojalá se atreviesen al mismo ejercicio de dignidad que algunos socialistas históricos», ha añadido tras valorar las declaraciones del expresidente del Gobierno Felipe González y del expresidente de Aragón Javier Lambán.
Sobre la crisis del PSOE, ha apuntado que «la renovación de Sánchez ha quedado en simple remiendo», porque su partido «tiene tal boquete que no hay parche que lo arregle», al vivir cada día «pendiente del Tribunal Supremo».
También se ha preguntado si, pese al anuncio de dimisión hecho el sábado, «el machista Paco Salazar sigue estando en nómina» de la Moncloa.
«A Sánchez ya no le respetan ni en el PSOE», ha agregado al describir que el sábado «le han tumbado el nombramiento de quien iba a ser el mandamás», en referencia a Salazar, que iba a ser nombrado uno de los tres portavoces adjuntos a la secretaria de Organización, Rebeca Torró. «Es una auténtica humillación», ha añadido.
A su juicio, «el autoproclamado capitán ha hundido el barco socialista», y los socios de su investidura «por el momento acompañan a Sánchez en el hundimiento del Titanic», hasta que decidan «si les vale la pena».