Pamplona, 3 sep (EFE).- Osasuna dio por concluido su apartado de llegadas con la incorporación de Sheraldo Becker, que se unió a las de Víctor Muñoz y Valentin Rosier, más el regreso tras lesión de Iker Benito.
Durante las últimas horas del pasado lunes el nombre del atacante neerlandés salió a escena. Osasuna gestionó bien el último día de mercado para hacerse con los servicios del atacante de 30 años liberado por la Real Sociedad.
A coste cero, los rojillos deberán ingresar a los txuri urdin variables en función de unos objetivos, cifras que no supondrían un gran desembolso para las arcas de Tajonar. Firma por dos temporadas más una opcional y su rendimiento es la gran incógnita. Cláusula de 10 millones de euros.
El primero en llegar fue Valentin Rosier. El lateral derecho galo aterrizó en Pamplona procedente de Leganés con un contrato de cinco campañas a coste cero y con una cláusula de rescisión de 15 millones de euros en LaLiga.
El club se anticipó a la salida de Areso y firmó a un jugador que ya destacó el pasado curso. Como ha demostrado en las primeras jornadas a las órdenes de Alessio Lisci, puede actuar como carrilero, gracias a su profundidad para pisar área rival con asiduidad y volver a las labores defensivas cuando se le requiere. Buenas sensaciones hasta el momento.
El 11 de julio, todavía en Sanfermines, la dirección deportiva realizó el gran movimiento del verano para los de El Sadar. Osasuna alcanzó un acuerdo con el Real Madrid para el traspaso del futbolista Víctor Muñoz, que suscribió una relación contractual con la entidad para las próximas cinco temporadas.
Los navarros abonaron 5 millones de euros por el 50 % del pase, a lo que podría sumarse otro en función de hitos deportivos. La cláusula de rescisión del atacante es de 40 millones, la más alta de la plantilla.
Titular en la segunda jornada ante el Valencia, el extremo catalán de 23 años demostró las razones de su fichaje. Velocidad, regate, desborde y descaro que le hicieron ganarse la ovación de su nueva afición a las primeras de cambio.
El técnico italiano vio con muy buenos ojos la vuelta de Iker Benito a Osasuna. Tras su fructífera estancia en Miranda de Ebro durante el pasado ejercicio, quedándose a las puertas del ascenso a Primera, el lateral, que también puede jugar como extremo, vuelve a su club formador.
En el apartado de salidas, seis han sido los futbolistas que dejaron la entidad. El capitán Unai García, Pablo Ibáñez, Rubén Peña, Bryan Zaragoza, Arnaiz y un Jesús Areso que dejó el importe íntegro de su cláusula de rescisión (12 millones de euros) para marcharse al Athletic Club de Bilbao.
Queda pendiente la llegada de un central que ocupe la baja de Enzo Boyomo durante los meses de diciembre y enero, momento en el que se desplazará con Camerún para disputar la Copa África. Veremos cómo se mueve Braulio Vázquez durante el mercado de fichajes navideño, pero de momento, plantilla compensada, competitiva y cerrada.