Washington, 29 sep (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presentó este lunes un plan de paz para Gaza que contempla la creación de un Gobierno de transición sin presencia de Hamás y tutelado por el republicano, la desmilitarización de la Franja y la posibilidad de negociar en el futuro un Estado palestino.
El mandatario detalló su propuesta de 20 puntos tras reunirse en la Casa Blanca con el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, quien expresó su apoyo a la iniciativa porque, dijo, coincide con los objetivos de su ofensiva sobre el enclave.
En una comparecencia de prensa conjunta, en la que no se aceptaron preguntas, Trump dijo que la pelota está ahora sobre el tejado de Hamás y advirtió que, si el grupo islamista rechaza el plan, Estados Unidos dará su «total apoyo» a Israel para que prosiga con su ofensiva.
El proyecto prevé un alto el fuego inmediato en Gaza, la retirada progresiva de las tropas israelíes y la liberación en un plazo de 72 horas de los 48 rehenes, tanto vivos como muertos, que siguen en manos de Hamás.
Israel debería liberar a cambio a 250 presos palestinos condenados a cadena perpetua y a 1.700 gazatíes detenidos tras los atentados cometidos por el grupo islamista el 7 de octubre de 2023.
En caso de que el acuerdo sea aceptado, Estados Unidos garantiza el envío de toda la ayuda humanitaria necesaria, cuya distribución se haría a través de la ONU.
Gobierno tutelado por Trump y sin Hamás
El plan contempla además el desarme total de Hamás, que quedaría excluido de la gobernanza de la Franja, y el establecimiento de un Gobierno de transición formado por tecnócratas palestinos y expertos internacionales, supervisado por una “Junta de la Paz” presidida por Trump y en la que participaría el ex primer ministro británico Tony Blair.
Posteriormente, una Autoridad Palestina reformada sería la encargada de asumir el control de Gaza, aunque Netanyahu advirtió que este organismo no podrá tener un papel en el futuro del enclave sin una «reforma radical» previa.
El primer ministro israelí expresó su respaldo a la propuesta de Trump al señalar que coincide con los objetivos de Israel en la guerra, que son la liberación de los rehenes, el desarme de Hamás, la desmilitarización de Gaza, el control israelí de la seguridad del enclave y la exclusión del grupo islamista de su futuro Gobierno.
Netanyahu insistió en que, si Hamás rechaza la propuesta, Israel mantendrá el asedio en Gaza «hasta terminar el trabajo», lo que según dijo «se puede hacer por las buenas o por las malas».
A pesar del respaldo expresado por Netanyahu al plan, el primer ministro afrontará oposición interna en su propio Gobierno, pues el ministro de Finanzas, el ultraderechista y colono Bezalel Smotrich, advirtió que no tolerará ninguna concesión en puntos que considera claves como son su rechazo a la existencia del Estado palestino o la permanencia indefinida del Ejército israelí en Gaza.
¿Hacia un Estado palestino?
El programa descarta por completo la anexión israelí de Gaza, incluye también un plan de reconstrucción y desarrollo económico para la Franja, y prohíbe los desplazamientos forzosos de los gazatíes y reconoce el derecho al retorno de quienes se marchen voluntariamente.
Este último punto supone un cambio respecto a la propuesta de Trump expuesta poco después de retornar a la Casa Blanca, cuando sugirió la expulsión de la población de Gaza para construir un proyecto inmobiliario denominado la «Riviera de Oriente Medio».
Trump prometió, además, la semana pasada, a líderes árabes y musulmanes, incluidos los de Catar, Egipto, Arabia Saudí y Turquía, que no permitirá que Israel anexione la Cisjordania ocupada y después insistió en ello públicamente.
Estados Unidos se compromete asimismo a mediar en un diálogo entre Israel y los palestinos para «acordar un horizonte político de coexistencia pacífica», y abre la puerta a que «se den las condiciones» para la futura creación de un Estado palestino.
La iniciativa llega en un contexto de creciente aislamiento internacional de Israel por su ofensiva en Gaza, calificada por una comisión independiente de la ONU, relatores de derechos humanos, ONG y un creciente número de países como genocidio, que ha causado la muerte de más de 66.000 personas desde octubre de 2023.
De igual forma, tras el reconocimiento del Estado palestino por parte del Reino Unido y Francia, aliados tradicionales de Tel Aviv, lo que ha sido condenado por EE.UU. e Israel.
Eduard Ribas i Admetlla